Los minusválidos de Barcelona siguen encerrados
Los minusválidos de Barcelona, que fueron expulsados a medianoche de anteayer del local del Servicio de Rehabilitación, en el que se hallaban encerrados, ocuparon ayer una antigua sede del Movimiento.Los encerrados, unos sesenta, habían sido también desalojados del juzgado de guardia, adonde habían sido trasladados desde la comisaría de Rosellón. Los minusválidos llevaban encerrados desde el 2 de noviembre, como protesta por las condiciones de vida que existen en la sociedad española para personas con sus dificultades.
Los minusválidos no habían querido abandonar el juzgado de guardia hasta que el Gobierno les diera una respuesta a las cuestiones que plantean. En todo momento han adoptado una actitud de resistencia pacífica, lo que obligó a la policía a tardar dos horas para persuadirles de que abandonaran los locales del Servicio de Rehabilitación.
Las fuerzas de orden público no dejan entrar a nadie en el piso en el que ahora se hallan encerrados los minusválidos. Ni siquiera pueden entrar abogados de las centrales sindicales, representantes de los partidos políticos o periodistas. Los propios minusválidos que salen no pueden volver al encierro. Los grupos políticos y las centrales sindicales mantienen reuniones para tratar de canalizar las peticiones de los minusválidos.
Por otro lado, ayer se reunió en las Cortes la ponencia designada por la comisión especial para el estudio de los problemas de los disminuidos físicos y mentales, con el propósito de redactar un proyecto de ley de protección de los minusválidos. Es posible, según ha afirmado el diputado de UCD Juan Ramírez Heredia, que el próximo lunes ya estarían redactadas las bases fundamentales.
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