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Cuatro bloques de veinte pisos ocuparán el solar del convento de las Reparadoras

Otro edificio típico del racionalismo madrileño, el convento de las Madres Reparadoras, en la avenida de Burgos, está siendo demolido, a pesar de que, sobre él, pesa una incoación de expediente de declaración de monumento histórico-artístico por parte de la Dirección General del Patrimonio Artístico y Cultural. La misma dirección general se contradijo al autorizar, trece días más tarde, la demolición del convento, excluyendo la iglesia del mismo y su entorno.

El convento que las Madres Reparadoras tenían en la avenida de Burgos, al comienzo de la autopista N-I, está siendo derruido por su nuevo propietario, Promociones Gran Madrid, SA, para construir, en el solar resultante, cuatro torres de viviendas, de veinte plantas cada una, y dos centros comerciales. Sobre el convento, la Dirección General del Patrimonio Artístico y Cultural había incoado, con fecha 28 de septiembre -aparecida la orden en el Boletín Oficial del Estado el 29 de octubre- expediente de declaración de monumento histórico-artístico. Sin embargo, la propia dirección general, el 11 de octubre, dio autorización a la propiedad para derribar todo el convento "salvo la Iglesia y su entorno». La Gerencia Municipal de Urbanismo, a la vista de tal autorización, dio la licencia de demolición correspondiente. El convento fue edificado en el año 1927, y es obra del arquitecto Luis Bellido. Pertenece, por su estilo al ya casi desaparecido racionalismo madrileño. La venta se realizó en el año 1974 por unos trescientos millones de pesetas, aunque la cifra puede no ser exacta. Ante esta cantidad, las Madres Reparadoras no precisan de permiso del Arzobispado de Madrid para hacer la venta. sino que han de acudir directamente para ello al Vaticano. Evidentemente. el Vaticano no tiene constancia de que el convento a vender pueda constituir una pieza arquitectónica apreciable, al que el urbanismo de Mádrid requiera que no se venda el convento. El Vaticano dio su conformidad.

La sociedad compradora pertenece a Indubán o, lo que es lo mismo, al Banco de Vizcaya. En nombre de ella actúo como firmante del contrato de compraventa Ramón Fontán.

El plan especial de la avenida de La Paz, en el que está incluida la parcela del convento, prevé el que, en el caso de que sobre una determinada parcela se realice alguna expropiación. para la autopista o para sus accesos, el volumen de construcción que tuviera la parte expropiada sea acumulable al resto. De esta forma, el terreno del convento, del que fueron expropiados 18.097 metros cuadrados, pudo tener un volumen de edificación mucho mayor de lo normal en el resto de Madrid -donde no pasa, por ordenanza de siete metros cúbicos por metro cuadrado- y alcanzó los trece metros cúbicos por metro cuadrado.

Ya en dos ocasiones anteriores, febrero y julio de este año, las Madres Reparadoras -y no Promociones Gran Madrid, SA- pidieron licencia de demolición del convento. En ambas ocasiones, tanto el Arca Metropolitana como el Colegio de Arquitectos de Madrid informaron negativamente y la Gerencia Municipal de Urbanismo denegó la licencia. Sin embargo, el hecho de que hayan sido las monjas y no la propiedad real del edificio quienes pidieron la licencia de demolición ha hecho pensar a los vecinos del número 14 de la avenida de Burgos -quienes han estado moviéndose en las últimas fechas para intentar evitar la demolición del convento- en la posibilidad de que, a pesar de que la venta se realizó hace tres años, no se hiciera escritura pública de tal cambio de propiedad.

Después de estas dos denegaciones de licencia de demolición, Promociones Gran Madrid se decidió a pedirla por su propia cuenta y riesgo. Pero, en medio, llegó la incoación del expediente de declaración de monumento histórico-artístico. Ante esto, la nueva propiedad corrió a entrevistarse según parece, con el inspector-jefe de Monumentos de la Dirección General del Patrimonio Artístico Fernando Chueca. Cronológicamente, después de esa entrevista, llegó la autorización de demolición parcial del convento.

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