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El Corral de la Pacheca presenta dos obras de Torres Naharro

El jueves se presentó la Compañía Corral de la Pacheca en Centro Cultural de la Villa de Madrid (plaza de Colón), donde representarán, hasta el 2 de octubre, la obra Burlas de secreto amor, de Juan Antonio Castro, basada en los textos Himenea y Calamita, de Bartolmé Torres Naharro. La obra, dirigida por Manuel Canseco, es un homenaje a Torres Naharro en el quinientos, aniversario de su nacimiento.De Juan Antonio Castro se han representado en Madrid Tiempo del 98, Ejercicios en la noche, Tauromaquia, Nata batida. Con El Corral de la Pacheca ha realizado las versiones de Olvidate de Tartufo, El perro del hortelano y Orestes. En esta ocasión, ha descubierto a uno de los creadores del teatro español.

«En este espectáculo -declara Juan Antonio Castro- he adaptado con fidelidad dos obras de Torres Naharro, Himenea y Calamita, unidas con una pequeña acción propia. Es sorprendente que ahora podamos descubrir a Torres Naharro. Himenea es su mejor obra, que se anticipa a la comedia de capa y espada y la comedia amorosa, con un concepto del honor femenino más libre y moderno que en Lope y Calderón. Calamita es una obra superdivertida, con una cierta procacidad y todos los ingredientes de un vodevil actual. Ha sido un trabajo gratificante, que requiere más esfuerzo que una obra propia».

Las obras de Torres Naharro fueron prohibidas por la Inquisición. Representadas en Italia, donde transcurrió gran parte de su vida, apenas se han publicado. «Es un autor olvidado, muy superior a Juan de la Encina y Lope de Rueda. Quizá Calamita sea estreno en España. No sólo se trata de un autor clásico, sino que tiene plena vigencia. Es más conocido por sus aportaciones teóricas, con las definiciones de teatro noticia y teatro fantasía, la división de las obras en cinco jornadas (actos) y el número ideal de los personajes».

Juan Antonio Castro considera que «la mejor forma de traicionar a los clásicos es respetarlos en su integridad». «Hay condicionamientos de la época que no nos pueden llegar. Una versión real de un clásico tiene que aproximarnos a su sensibilidad. Lo clásico se identifica con la pesadez y esto ha alejado al público. Es necesaria una mayor atención a nuestro teatro clásico. La compañía El Corral de la Pacheca está dedicada a autores españoles, clásicos y modernos. Con esta obra han realizado un montaje con una ingenuidad deliberada, buscando la frescura, como si se representara en la época de Torres Naharro».

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