No habrá nuevo acuerdo USA-URSS sobre armas estratégicas hasta octubre
Estados Unidos y la Unión Soviética no podrán llegar a un nuevo acuerdo sobre limitación de armas estratégicas antes de que expire el vigente, en el próximo mes de octubre, según se desprende de declaraciones de funcionarios norteamericanos que anunciaron ayer que no se celebrarán conversaciones de alto nivel entre USA y la URSS hasta septiembre.
El secretario de Estado norteamericano, Cyrus Vance, y el ministro de Asuntos Exteriores soviético, Andrei Gromiko, no podrán entrevistarse antes, según la versión oficial norteamericana, a causa de la apretada agenda de trabajo de Vance, quien visitará Oriente Próximo en el mes de julio, y la República Popular China, en agosto. El encuentro Vance-Gromiko se producirá en Nueva York hacia la última década de septiembre, con motivo de la sesión inaugural de la Asamblea General de las Naciones Unidas. Una conversación posterior podría tener lugar en Washington en los primeros días de octubre.Este retraso de la reunión entre los dos negociadores de más alto nivel impedirá en la práctica que un nuevo acuerdo sobre limitación de armas estratégicas esté preparado antes del día 3 de octubre, fecha en que caduca el vigente pacto, firmado hace cinco años. Los funcionarios norteamericanos que comunicaron estos datos a la prensa descartaron que el retraso en la entrevista Vance-Gromiko estuviera motivado por la llegada a un punto muerto en las negociaciones de Ginebra.
En la última reunión entre Vance y Gromiko, celebrada en mayo en Ginebra, los dos ministros interpretaron de forma diferente el resultado de sus negociaciones. Para Vance se llegó a un «acuerdo de base», mientras que Gromiko acusó a Estados Unidos de intentar conseguir «ventajas unilaterales", con lo que se retrasó el éxito de las negociaciones.
Cyrus Vance se refirió hace unas semanas a la posibilidad de que el nuevo acuerdo no estuviese terminado para la fecha de expiración del ahora vigente, pero restó importancia al asunto al señalar que ambas partes podrían acordar una extensión de la vigencia del mismo o continuar como si el pacto caducado siguiera teniendo valor.
