Quince atentados en el País Vasco durante el fin de semana

Un total de quince atentados, doce de ellos con cargas explosivas, se han registrado este fin de semana en el País Vasco, sin que ninguno de ellos causara daños personales, aunque sí pérdidas elevadas, que por ahora no han sido evaluadas en su conjunto. Se desconoce el tipo de explosivo empleado, aunque el caso del artefacto que destruyó el repetidor de RTVE en Vitoria se informa que se trataba de exógeno plástico activado por pilas.

La explosión más poderosa hubiera tenido lugar, sin embargo, en el alto de Castrejana -carretera comarcal 6.318, de Bilbao a Reinosa- si dos personas que se dedicaban a la búsqueda de caracoles no hubieran descubierto casualmente, en el hueco de una roca, un balde, de plástico que,contenía trece kilos de pólvora lenta, numerosos tornillos, dos detonadores y una mecha de unos cuatro metros de longitud. En una valla existente al otro lado de la carretera se han observado unas manchas de barro que posiblemente hacían de referencia. para hacer saltar la carga coincidiendo con el paso de algún vehículo de la Guardia Civil, según se cree en medios oficiosos. Las características del explosivo, que fue desactivado el sábado por la noche, permanecen bajo secreto de sumario.Aunque ninguna organización había reivindicado hasta ayer tarde, esta cadena de explosiones, en medios bien informados se tenía la convicción de que podían ser obra de la rama político-militar de ETA, que de este modo reafirma su decisión de reanudar la lucha armada, al igual que lo ha hecho ya la rama militar, que se ha adjudicado la autoría de los atentados perpetrados la semana pasada en Madrid y en la central nuclear de Lemóniz (Vizcaya). Las diferencias entre los dos sectores de ETA habrían quedado salvadas así, al menos en el terreno de la acción armada.

La primera de las explosiones ocurridas en el País Vasco, tenía lugar sobre las once de la noche del sábado enlos servicios de la planta baja del Ayuntamiento de Bilbao. La centralita telefónica quedó inutilizada, varios muros fueron desplazados y la onda expansiva alcanzó, la escalera principal, de donde se desprendió partedel pasamanos. Algunos techos falsos, cristales y material de oficina sufrieron desperfectos valorados sobre 600.000 pesetas.

Objetivo: postes repetidores

A partir de ese momento, y hasta la madrugada del lunes, se sucederían las explosiones, todas ellas de noche. Blanco principal han sido en esta ocasión los repetidores de Radiotelevisión Española, que en número de seis han resultado destruidos. Dos de ellos en la zona de Mondragón (montes Ebakue y Olanditxu), otro en Tolosa, un cuarto en el Municipio de Santurce (monte Serante), otro más en Durango (monte Oiz) y el último, a cinco kilómetros de Vitoria, en el monte Zalviarán.

En los seis casos fueron abatidas las torretas, que ayer eran reparadas con urgencia por los técnicos de RTVE. La explosión más grave fue la del monte kalviarán, ya que a lo largo de todo el domingo no fue posible ver la televisión en la capital alavesa.

Un segundo objetivo fueron las instalaciones de la Telefónica, con dos explosiones en la localidad guipuzcoana de Rentería. Una de ellas causó daños estimados en un millón de pesetas en la central de la .población, a primeras horas de la madrugada del domingo, mientras que una segunda bomba destruía el transformador situado en el Txoritokieta.

El décimo artefacto hacía explosión sobre las, dos de la madrugada del domingo en el cuartel de la Guardia Civil de Tudela. La bomba había sido colocada en una ventana de la planta baja, en la fachada lateral derecha. Quedó ,destruida la ventana, numerosos cristales y parte de la pared.

Otras dos explosiones destruían en la madrugada de ayer una pizzería de San Sebastián, situada en la esquina del bulevar con la calle de San Jerónimo, y el coche de un inspector de policía que se encontraba aparcado en la calle del Marqués de Arriluce, de Baracaldo. El vehículo, un Ford Fiesta, matrícula M-0966-BW, saltó por los aires, al tiempo que se producía en el suelo un socavón de diez centímetros de profundidad y quedaban rotos un centenar de cristales en los alrededores.

Por último, también en la madrugada del lunes, eran incendiados otros dos coches en Bilbao y era destruido el escaparate de una tienda de muebles en Portugalete. En la fachada del establecimiento (Comercial Solla, en el número 24 de la Calle de Carlos VII) había sido pintada la leyenda «por chivato ».