«No sabemos nada concreto»

«No sabemos nada concreto todavía, ni vemos nada claro. El Gobierno está dando gestos y pasos, pero a través de lo que ha hecho público el Consejo de Ministros demuestra que no se acordaron de nosotros. Estamos a la espera», explicaría a EL PAIS, a través del hilo telefónico desde el interior del penal de Burgos, José Ignacio Múgica Arregui (Ezkerra).«Nuestro estado de ánimo -continuó- está peor que nunca, pero no por los nervios ante la salida o no de la cárcel, sino por las zancadillas que se están dando ahí fuera. ¿Si nos sentimos manipulados? El movimiento del pueblo por los presos ha sido auténtico, pero el Gobierno ha jugado con nosotros»

-¿Cuál es vuestra postura ante las elecciones?

-Nosotros pensamos que hay que participar si se excarcela a todos los presos y estamos en la calle antes de las elecciones. El movimiento abertzale no puede quedar en manos de la derecha vasca. Para nosotros el juego parlamentario es otra forma de lucha que ha de llevar el pueblo vasco. Hasta ahora toda la campaña pro amnistía ha logrado la excarcelación de los presos, que todavía tiene que llegar. Aunque no es la amnistía por la que ha luchado el pueblo, sí supone un reconocimiento de la larga opresión que está sufriendo el pueblo vasco por conseguir sus libertades democráticas. Todo este «alargamiento» en la concesión de la amnistía ha servido para dividir y romper al país, para sembrar la discordia entre la izquierda abertzale. También se le ha quitado tiempo en la campaña electoral.

-¿Cuál es vuestra opinión sobre la actual división de las fuerzas vascas?

-Tenemos muchas dificultades para saber la situación real, porque nuestra información viene por medio de unos contactos con el exterior controlados. No conocemos el origen y la discrepancia, pero sentimos optimismo ante la nueva etapa que comenzará tras las elecciones. Creemos que se decantarán las posturas de las fuerzas dentro del KAS, y sentimos optimismo ante el futuro del KAS y el papel que EIA (el Partido para la Revolución Vasca) puede jugar dentro de él. Ante la nueva democracia burguesa que se prevé tras las elecciones, se darán una mayor tolerancia para las organizaciones del KAS.