_
_
_
_

El PSOE concede prioridad al empleo

Con una mayor concreción que sus predecesores, el Partido Socialista Obrero Español (PSOE) presentó ayer su esbozo de programa económico, en la cuarta jornada de la semana informativa organizada por el Instituto Español de Analistas de Inversiones. Anteriormente, expusieron su filosofía las centrales sindicales Unión General de Trabajadores y Unión Sindical Obrera; Comisiones Obreras excusó su presencia por motivos circunstanciales.El PSOE presentó su programa económico orientado a la consolidación de la democracia en base a dos criterios fundamentales: resolver la crisis y modernizar el país, entendiendo per esto último alcanzar los niveles de desarrollo económico y social de los países europeos.

Respecto a la crisis, el criterio del PSOE concede prioridad absoluta al tema del paro, por lo que preconiza el establecimiento de una política de creación de puestos de trabajo, para lo que se establecerían desgravaciones fiscales a las empresas que ampliaran sus plantillas en más del 5%, se dirigiría la inversión pública y privada hacia este fin y se reformaría la Seguridad Social, que actualmente incide de modo negativo sobre el empleo. Por otra parte, se rebajaría la edad de jubilación y se retrasaría la escolaridad. También se dotaría un sistema efectivo de prestación de paro, con percepciones suficientes para la subsistencia.

Otro aspecto importante de la crisis -segundo en el programa de actuación- es la inflación. Para combatirla, se fijan criterios de crecimiento del 4% anual, y se establecerán nuevas vías de distribución de la renta, tanto mediante una reforma fiscal como a través de una reordenación del gasto público, orientándolo a la dotación de equipamientos sociales. Se pretende, asimismo, cerrar el abanico de salarios y frenar el alza de los precios alimenticios y de la vivienda y controlar el comportamiento de los monopolios. Aquí se incluye una municipalización del suelo.

Finalmente, el tercer aspecto se refiere al desequilibrio en el comercio exterior, que podría frenarse mediante una reducción de las importaciones energéticas -política de precios- y agrícolas -comercialización-, al tiempo que la entrada en la CEE facultaba un incremento de las exportaciones. Igualmente, se deciden por una flotación libre de los tipos de cambio dejando fluctuar la peseta.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_