Angelopoulos y Rossellini, en la Filmoteca

La película estrella de la programación de la Filmoteca para esta semana es sin duda O Thiassos (El viaje de los comediantes), del realizador griego Theo Angelopoulos, que se proyectará el próximo viernes, día 11 a las seis de la tarde, en el local de López de Hoyos, 161.

Angelopoulos, del que la Filmoteca ofreció en su día el resto de su breve filmografía, es probablemente uno de los realizadores más interesantes del momento actual europeo. Descubierto para España en el último Festival de Benalmádena, los expertos señalan O Thiassos como su película de mayor valor.

«Para superar el proceso de identificación en la figura del personaje-héroe principal son evitadas las caracterizaciones sicológicas y naturalistas de los personajes mismos que participan así de modo «colectivo» en la acción —escribe Flavio Vergerio en la Revista del Cinematógrafo—. Los encuadres son, a menudo, larguísimos (de siete a nueve minutos) —añade Vergerio—, con una organización interna muy complicada. El plano-secuencia, con largos travellings, panorámicas y movimientos circulares, representa, con frecuencia, la síntesis y la interpretación dinámica de una situación histórica (dejando, mientras tanto, mucha libertad de interpretación a los espectadores). Si para Jancsó el plano-secuencia, en su morbosa ambigüedad, es estático, en Angelopoulo, en cambio, es dialéctico, dramático.»

El ciclo dedicado a Marguerite Duras incluye en esta semana la exhibición de La música, Destruir, dice ella, e Hiroshima, mon amour, cuyo guión firma la escritora.

También en esta semana la Filmoteca inicia un ciclo dedicado a Roberto Rossellini, con la proyección de La nave blanca, Roma, citta aperta, y Paisa. El dedicado a Vis conti continúa con la exhibición de Vague stelle dell'orsa, Ludwig y Morte a Venezia.

En los locales de la sede de la Filmoteca (carretera de la Dehesa de la Villa, s/n.) se proyectarán cuatro sesiones dedicadas al cine soviético: Zvenigora y La tierra, de Dovjenko; Tempestad, de Vladimir Petrov, y El diputado del Báltico, de Zardhi y Heifitz.