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Mondale inaugura hoy la era de Carter en Occidente

La elección de Bruselas, sede de la Alianza Atlántica y de las comunidades europeas, como primera etapa de la gira por Europa y Japón del vicepresidente de los Estados Unidos, Walter Mondale, tiene un significado político especial.

Mondale, que llegará a la capital belga hoy por la noche, desayunará mañana con Leo Tindemans, primer ministro belga. Se entrevistará, a continuación, con Joseph Lúris, secretario general de la OTAN, y con los embajadores representantes permanentes del Consejo de la OTAN. A primera hora de la tarde celebrará una reunión de trabajo con varios miembros de la comisión de las comunidades europeas, bajo la dirección de su presidente, Roy Jenkins. Antes de emprender viaje a Bonn, Walter Mondale. recibirá en Bruselas a Max van der Stoel, ministro holandés de Asuntos Exteriores.De Bruselas, Mondale viajará a Bonn para entrevistarse con el canciller Helmut Schmidt, el 25, y visitar Berlín, el 26. Al día siguiente continuará su itinerario hacia Roma, donde verá al presidente de la República, Giovanni Leone, y al primer ministro, Andreotti. El 27, Mondale estará en Londres, para conversar con James Callaghan, primer ministro británico, y el 28 se trasladará a París. En la capital francesa, después de un diálogo con el secretario general de la OCDE, Van Lennep, Mondale será recibido por el presidente Valery Giscard d'Estaing. De París irá a Tokio,, última etapa de su gira, para entrevistarse con el primer ministro nipón, Takeo Fukuda.

OTAN: problemas de defensa

En medios atlánticos de la capital belga se espera que la estancia de Mondale en la sede de la OTAN supere la simple cortesía. Hay muchos temas de interés común a discutir entre los aliados occidentales.

En primer lugar, Walter Mondale podría exponer los criterios de la nueva administración Carter en materia de defensa. Las promesas electorales del presidente de los Estados Unidos de reducir el gasto militar norteamericano inquietan a algunos países europeos, principalmente Alemania Federal, con fronteras comunes con países del Pacto de Varsovia. Mondale debería tranquilizar a los europeos, al tiempo que recordarles la necesidad de un esfuerzo suplementario para contribuir al presupuestocomún dedefensaen Europa. Esen tal contexto que se tratará, probablemente, del capítulo de los AWACS, sistema de radares permanentes montados en aviones «Boeing». para advertir sobre un posible ataque del Este.

Las negociaciones sobre limitación de armas estratégicas (SALT II) y reducción mutua y equilibrada de fuerzas en Europa central (MBRF), así como la segunda fase de la Conferencia de Seguridad y Cooperación Europea (CSCE), a celebrarse dentro de unos meses en Be1grado, formarán también parte de la agenda de Walter Mondale en la OTAN.

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Estados Unidos a griegos y turcos para resolver el litigio en la isla de Chipre. Washington es consciente del peligro, para la defensa del flanco sur de la OTAN, de las tensiones entre Atenas y Ankara.

Walter Mondale podría recordar que la crisis económica no debe ser pretexto para reducir los presupuestos de defensa entre los países miembros de la OTAN.

CEE: problemas económicos

Con los dirigentes de la Comisión Europea Walter Mondale pasará revista a la lista de problemas actuales entre los USA y la CEE.

El momento parece bueno para activar la cooperación entre Washington y Bruselas en -los foros de negociaciones internacionales. Los europeos, quizá con demasiado optimismo, esperan que la -nueva administración Carter sea más maleable que la precedente para enfocar una,postura coordinada de los países industrializados en las conversaciones entre consumidores y productores de materias primas («diálogo norte-sur»). Mondale explicará a los europeos, tanto en Bruselas como en las demás capitales, las ideas de la administración Carter en el capítulo de la crisis económica, relaciones comerciales y política monetaria.

La perspectiva de una ampliación de la CEE, con la entrada de Grecia, Portugal y España, puede ser también objeto de conversaciones. Estados Unidos valorará, sin duda, los aspectos polí,ticos y económicos de la operación.

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