Se concede la medalla de oro de Guipúzcoa, a título póstumo, al señor De Araluce

Con la asistencia del presidente de las Cortes, Torcuato Fernández Miranda, y de los ministros de Asuntos Exteriores y Gobernación, señores Oreja y Martín Villa, la Diputación Provincial de Guipúzcoa, de la que era presidente el señor De Araluce y Villar, se reunió en sesión extraordinaria y plenaria y, puestos en pie, dejando vacío el asiento presidencial, el vicepresidente de la Corporación, Santiago Sanmartín, leyó una moción en la que, en su preámbulo, habló de la forma del atentado y de la vioencia que el pueblo vasco desea ver sumergida en el olvido.Habló también de la dedicación del señor De Araluce a los problemas de Guipúzcoa durante los años que sirvió al frente de la Diputación, y, finalmente, se aprobaron los siguientes acuerdos:

1. Condenar con el más profundo dolor y con la máxima energía este nuevo acto de salvaje terrorismo, haciendo una llamada implorante para la erradicación definitiva de lar violencia de nuestra noble tierra vasca.

2. Conceder a título póstumo al excelentísimo señor Juan María de Araluce y Villar, presidente de esta Diputación, al amparo del acuerdo de Su Excelencia de 23 de junio de 1972, la primera Medalla de Oro de la provincia, inscribiendo su nombre en la escalera de honor de este palacio para perpetuo reconocimiento.

3. Conceder asimismo, al amparo del mismo acuerdo de 1972, la medalla de plata de la provincia a los señores Luis Francisco Sanz, Antonio Palomo, Alfredo García y José María Elicegui, que dieron su vida en el cumplimiento del deber al servicio de nuestro presidente.

4. Expresar nuestra sentida condolencia a los familiares de las víctimas, haciéndoles expresión escrita del acuerdo adoptado por esta Corporación.

5. Declarar quince días de luto para la Diputación de Guipúzcoa, guardándose en ellos las prescripciones de rigor.