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Pinochet aplaudirá a Panatta

Italia ha decidido, al fin, enviar a su equipo de tenis a disputar la final de Copa Davis a Chile. El deporte italiano ha superado todas las presiones políticas que sobre él han recaído en los últimos días. Pinochet podrá aplaudir a Panatta.

Los políticos italianos, en general, se han manifestado en contra de la participación de su equipo de tenis. Incluso el ex árbitro de fútbol y diputado democristiano, Lo Bello, ha tomado muy a pecho el que sus jugadores compitan con los súbditos de Pinochet cerca de las cárceles.

Es indudable pie el deporte actual no puede sustraerse las influencias políticas, pero comienza a ser cargante el que todas las injusticias mundiales pretendan ser solventadas a través de la protesta deportiva. Si los diputados de un congreso se manifiestan en contra de la relación con Chile, lo que deben hacer es cargar las tintas sobre otras materias más importantes. El deporte es, a fin de cuentas, lo menos trascendente de los contactos entre países.

Por otra parte, resulta ridículo aceptar unos reglamentos y mostrarse contrarios a los mismos cuando toca la china. Una postura más congruente sería pedir antes del inicio de una competición la suspensión de todas aquellas naciones que contravienen las normas más elementales de la justicia.

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