Los secuestradores croatas, devueltos a las autoridades norteamericanas

Los cinco nacionalistas croatas que el pasado viernes secuestraron un Boeing 727 de la compañía TWA, que hacía el trayecto Nueva York-Chicago, fueron trasladados a los Estados Unidos, después que se rindieran a las autoridades francesas en la madrugada del pasado domingo.Los secuestradores se entregaron a las autoridades francesas, que desde la tarde del sábado estuvieron negociando con ellos en el aeropuerto parisiense Charles de Gaulle, con ayuda del embajador norteamericano en Francia, Kenneth Rush.

El grupo decidió entregarse cuando vieron que sus demandas de publicación de una nota en los principales periódicos norteamericanos habían sido satisfechas.

Una vez que los rehenes fueron puestos en libertad, los piratas aéreos fueron conducidos un avión francés y enviados a Nueva York, donde un tribunal federal los juzgará por actos de piratería aérea.

Sin embargo, el secuestro de los denominados soldados de Croacia libre tuvo una ramificación dramática en Estados Unidos, cuando los secuestradores se encontraban a miles de kilómetros. Una bomba estalló en el departamento de equipajes del aeropuerto de Nueva York y mató a un policía

e hirió a otro tres. Después de secuestrar el 727, el comando croata anunció por radio que habían colocado dos artefactos explosivos en el aeropuerto Kennedy. El primero no pudo ser desarticulado a tiempo y mató al agente el pasado sábado;

la segunda bomba se encontró horas antes de que los cinco nacionalistas croatas llegasen a Nueva York devueltos por las autoridades francesas.

Después de conocidos estos hechos, un portavoz del FBI dijo ayer que además de los cargos por piratería aérea, el tribunal federal, que juzgará a los cinco secuestradores, les acusará de homicidio del policía muerto a causa de la explosión de la bomba.

Las penas a que podrian ser condenados, van de 20 años de

cárcel a cadena perpetua e incluso la muerte, según la jurisdicción que entienda el caso.