Se descubren graves defraudaciones en dos Ayuntamientos de Pontevedra
La Corporación municipal de Tomiño (Pontevedra) ha tomado el acuerdo de denunciar a la fiscalía de la Audiencia Provincial una presunta defraudación al erario municipal, por importe de 1.300.000 pesetas.Los hechos se han conocido, al parecer, como consecuencia de las investigaciones iniciadas en varios Ayuntamientos de la provincia por parte del servicio de inspección y asesoramiento de las corporaciones locales, a raíz de descubrirse en Porriño otra irregularidad: el abono de 800.000 pesetas -recuperadas- en concepto de impuestos sobre propiedades municipales con cargo a fondos del Ayuntamiento y con destino a la Delegación Provincial de Hacienda, donde no llegó esa cantidad.
El problema, sobre el que en su día adelantó información EL PAIS, está subjudice, al haber sido procesados un jefe de negociado de Hacienda y el depositarlo de fondos del Ayuntamiento, a los que se requirió una fianza de 300.000 pesetas.
Ahora, en Tomiño, se ha descubierto que aparecen abonadas a Hacienda 1.300.000 pesetas, importe de atrasos a la Seguridad Social Agraria correspondientes a 1972. cantidad que no llegó a la delegación ministerial. La irregularidad coincide con la etapa en que fue funcionario del Ayuntamiento el depositario de fondos procesado por su posible participación en las irregularidades de Porriño.
En esta última población, la Corporación municipal acaba de decidir denunciar otro hecho ante los servicios de inspección y asesoramiento, al propio tiempo que ha abierto un expediente a la empresa Cerámica del Miño, SA, por haber extraído entre 40.000 y 50.000 metros cúbicos de arcilla de una concesión limitada a 2.000 metros cúbicos. La diferencia supone una pérdida de ingresos para el Ayuntamiento de aproximadamente un millón de pesetas. Varios aspectos aparecen oscuros en esta última supuesta ilegalidad que se investiga. En primer lugar, en el acta de la última reunión celebrada por la Comisión Municipal Permanente que presidía el alcalde anterior, figura que la concesión a la referida empresa se hizo por unanimidad, y uno de los concejales que participó asegura ahora que votó en contra, a pesar del testimonio del entonces secretarlo accidental. El vigilante municipal afirma que un concejal le indicó que no era necesario cuidar con demasiada atención la actividad de la empresa extractora, lo que desmiente el concejal que recientemente había sugerido a la alcaldía la conveniencia de ampliar el período de concesión a Cerámica del Miño, SA, alegando que no había tenido tiempo de extraer los 2.000 metros cúbicos de arcilla.
El nuevo affaire ha interesado especialmente en Porriño, por los antecedentes de ilegalidades que hay en el término municipal, con 14.000 habitantes. Hace un par de años se descubrieron graves irregularidades en las explotaciones de canteras, que motivaron actuaciones judiciales. concluidas con una sentencia del Supremo que inhabilitaba por dos años a un concejal. En aquella época se suicidó un policía municipal supuestamente relacionado con el asunto.
La posible corrupción en cadena en la zona sur de la provincia de Pontevedra podría motivar, según se especula, nuevas investigaciones.
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