La crítica en radio y televisión, debe desarrollarse más a fondo

La segunda jornada del Congreso sobre La crítica en los medios de comunicación, organizado por Anche y Ercom, se centró en la critica de cine y teatro, dedicando la tarde a la crítica en los medios audiovisuales. Se da un consenso mayoritario en la consideración de que por parte del público o receptor de los mensajes que cualquiera, de estos medios de comunicación existe imposibilidad para que expresen su opinión sobre los mismos. En cine y teatro son normalmente, los críticos quienes marcan las pautas de los considerados buenos espectáculos o buenos productos culturales, mientras en los medios audiovisuales, la posibilidad de que éstos sean sometidos a una crítica ejercida por parte de los receptores es prácticamente nula, a pesar de los avances tecnológicos que poseen.

La mesa redonda dedicada al cine, que tuvo como moderador a Román Gubern, se permitió hacer una crítica de la crítica. Fue debatido el tema sobre la función y finalidad que tiene la crítica, así como la metodología y efectos que produce. En este sentido, la crítica sufre una crisis, ya que carece de una metodología concreta, al menos en el momento actual español, y por otro lado está plenamente mediatizada por las características que rigen en los medios donde se ejerce. ¿Cómo realizar una crítica cultural científicamente seria cuando va dirigida a un público mayoritario y está ceñida a las dos holandesas que permite el diario?

Esta cuestión, debatida ampliamente, pareció que exigía por parte del crítico de cine y teatro el rebajar el lenguaje científico a un lenguaje de uso común con el fin de actuar de mediador entre la obra cultural y el receptor de la misma para facilitarse su comprensión. En este sentido hubo cierta reticencia en admitir una critica que tiene como objetivo fundamental desarticular todos los elementos ideológicos y políticos que posee la creación artística.

Contexto social

En la mesa redonda sobre crítica de teatro, que tenía como moderador a Fábregas, del diario Avui, los problemas planteados fueron similares. En última instancia se volvía a tratar la función del crítico frente al receptor del producto cultural, aunque se apuntó que éste no debía asumir simplemente un papel de divulgador del teatro hecho en un contexto digno, sino también actuar de animador allí donde se diesen experiencias colectivas de interés: asociaciones de barrios, pueblos, etcétera, ya que el teatro en sí mismo es un hecho cultural plenamente enraizado en un determinado contexto social.Si por parte de los críticos de cine y teatro hubo capacidad y voluntad para revisar el estado de trabajo que actualmente realiza en los distintos medios, por parte de los ponentes que participaron en los temas de radio y televisión, quedó patente la necesidad de que todavia se desarrolle una crítica, a estos medios. En concreto, la crítica sobre la radio es mínima, y la crítica de televisión es de reciente creación.