El centenario de Chillida será un “lugar de encuentro” en torno a una obra universal

A Eduardo Chillida (1924-2002), uno de los escultores más relevantes del siglo pasado, le recuerdan sus descendientes como “un creador de lugares”, en palabras de su hijo Luis. Chillida cumpliría 100 años el próximo 10 de enero. La fundación que lleva su nombre y el de su esposa, Pilar Belzunce, celebrará la efeméride con un programa de exposiciones, conciertos, publicaciones y otras actividades culturales a lo largo del próximo año que servirán para divulgar la obra y los valores que distinguieron en vida al artista vasco. Cada uno de los actos que conmemorarán el centenario del nacimiento de Chillida pretenden “dar a conocer el trabajo de un artista que tenía sus raíces en el País Vasco, pero abrazó los horizontes de todo el mundo y los transformó en lugares únicos para el encuentro de la sociedad”, según sus organizadores.

El año Chillida será un “lugar de encuentro”. Este es el lema oficial, ­Eduardo Chillida 100 años. Lugar de encuentro,­ elegido para poner en valor la obra pública del artista, 45 esculturas repartidas por medio mundo, y profundizar en todas las facetas artísticas que puso en práctica. El caserío Zabalaga y su entorno, donde tiene su sede el museo dedicado al autor en Hernani (Gipuzkoa), será el epicentro del programa cultural, pero la firma de Chillida se extenderá en galerías y museos internacionales como el Würth de Künzelsau (Alemnania), el Museum of Art de San Diego (EE UU) o el Centro de Extensión de la Pontificia Universidad Católica de Chile. “Es una oportunidad para acercar la creación del artista a una amplia diversidad de culturas, generaciones y orígenes del mundo”, ha afirmado este miércoles su nieto Mikel Chillida en la presentación de los actos del centenario, que se repartirán en el tiempo entre diciembre de este año y finales de 2025.

“Chillida es de todos. Queremos hacer sentir que Chillida nos pertenece y enriquece a todos, por lo que hizo y por lo que supuso”, ha destacado su nieto en el acto, al que han asistido autoridades y representantes de las principales entidades culturales vascas. Luis Chillida ha destacado que la obra de su padre debe ser entendida como “un lugar de encuentro” allí donde están instaladas sus obras, en ciudades como San Sebastián, Madrid, Valladolid, Palma de Mallorca, Barcelona, Berlín, Frankfurt, Dallas o Washington.

Lugar de encuentro en memoria de Chillida arrancará el 2 de diciembre en el Museo Chillida Leku con la apertura del Universo Maeght, una exposición que propondrá un diálogo entre las obras de Chillida y otros artistas con los que trabajó el marchante británico y su esposa Marguerite, como Georges Braque, Alexander Calder, Alberto Giacometti, Joan Miró, Marc Chagall o Pablo Palazuelo. A mediados de ese mismo mes el Museo Würth reunirá 70 esculturas y murales de Chillida y Anthony Caro, nacidos ambos en 1924.

La Casa de Cultura de Avilés (Asturias) mostrará desde mediados de diciembre siete esculturas en bronce y piedra de mediados del siglo pasado, además de dibujos realizados con tintas de la misma época. En la sala Artegunea de Tabakalera, en San Sebastián, el fotógrafo Jesús Uriarte presentará una selección de imágenes realizadas durante más de dos décadas de relación personal y profesional con el escultor que reflejan aspectos íntimos e inéditos de su proceso creativo. La Pontificia de Chile acogerá El espacio de las cosas a partir de marzo de 2024, con obras que enseñan la capacidad que tenía Chillida para crear espacios y moldear los materiales.

Una de las exposiciones más impactantes será la muestra de la colección de Telefónica, una de las más relevantes del autor vasco y que mostrará grandes piezas de acero en Chillida Leku. El sello del escultor llegará también al Museo Balenciaga de Getaria (Gipuzkoa), el Museo Nacional de Escultura de Valladolid, la Hauser & Wirth de Menorca, los museos San Telmo de San Sebastián y Bellas Artes de Bilbao, el Artium de Vitoria o el The San Diego Museum of Art, que reunirá esculturas y obras de papel prestados por otros museos estadounidenses.

La Orquesta Sinfónica de Euskadi se sumará a los actos del centenario con un musical del compositor Antonio Lauzirika y la Sociedad Coral de Bilbao ofrecferá un repertorio de Bach, uno de los músicos favoritos de Chillida. El programa incluye un espectáculo de danza y el documental Ciento volando, de Arantxa Agirre. Una unidad didáctica saldrá a la luz para distribuirse en los centros educativos y mostrar a los escolares el legado del creador de El Peine del Viento.

La editorial Norma Cómics publicará un cómic sobre la obra de Chillida, La Fábrika prepara una edición especial con escritos del artista, un catálogo de la exposición de Jesús Uriarte y una publicación del arquitecto Joaquín Montero sobre el proceso de creación del Museo Chillida Leku. Su hija Susana Chillida recopilará en el libro Una vida para el arte vivencias y recuerdos entrañables junto a sus padres.

Y el mismo día en que Chillida habría cumplido 100 años, el día 10 de enero de 2024, el Victoria Eugenia será escenario de un homenaje con “un mix de disciplinas artísticas” para celebrar “un día muy especial”, ha destacado su nieto.