Paco Luis Martos, el maestro de los artesonados mudéjares que fascina a las estrellas de Hollywood
El ganador del Premio Nacional de Artesanía 2022 conjuga tradición e innovación con los techos que recrean la arquitectura de hace ocho siglos
A Paco Luis Martos (Villanueva del Arzobispo, Jaén, 1969) su pasión por la carpintería le viene desde su infancia. En el taller de su tío apodado como Chaparrete, entre maderas, clavos y tornillos, cultivó su afición por un oficio que él ha elevado a la categoría de arte al convertirse en uno de los principales referentes en la construcción de techos de madera de tipo mudéjar. Su obra más sobresaliente se concentra en castillos, monasterios y palacetes y buena parte de su clientela llega desde Los Ángeles, donde tiene abierta una delegación en la que atiende a una clientela exclusiva entre la que se encuentran famosos de la meca del cine.
“Siempre me ha fascinado trabajar siguiendo la misma técnica y estilo del arte arquitectónico y ornamental desarrollado en España entre los siglos XIII y XVII”, comenta desde su taller en el casco histórico de Úbeda (Jaén). Martos fue galardonado el pasado diciembre con el Premio Nacional de Artesanía 2022, que concede el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo, por sus “aportaciones significativas a la cultura de los oficios y compresiva de los factores de competitividad”.
La última intervención de Paco Luis Martos ha sido en el palacio de Las Dueñas de Sevilla, donde ha restaurado un artesonado de madera del siglo XVI. “Intento que la arquitectura se adapte al medio utilizando materiales del entorno, pero sin perder la esencia y la tradición”, apunta Martos, exponente de una especialidad artesana que se desarrolló en España en torno a los siglos XIII y XVII y que se encontraba prácticamente desaparecida. Sin perder de vista los orígenes de esta técnica se apoya en la tecnología digital (las maquetas las realiza con impresoras 3D) y su obra también ha sido premiada por su compromiso con el medio ambiente, puesto que solo usa productos naturales: madera con certificado de sostenibilidad y reciclada, cera de abeja para los acabados, y pigmentos naturales, entre otros.
Pero quizás la actuación de la que se siente más satisfecho el artesano jiennense ha sido la reconstrucción de la Sala Capitular del Monasterio de Sijena (Huesca), considerada como la Capilla Sixtina del Románico europeo, donde se han recuperado los artesonados del siglo XIII que existían en Sijena y que fueron incendiados durante la Guerra Civil. A partir de fotografías en blanco y negro tomadas justo antes de la quema de los doce artesonados existentes originariamente, Paco Luis Martos ha empleado gubias, formones, gramiles y pigmentos naturales como los utilizados hace 800 años para lograr la máxima fidelidad con los artesonados originales, de unos nueve metros cuadrados de superficie y cerca de una tonelada de peso cada uno.
“Puede que haya sido uno de los proyectos más importantes y satisfactorios de mi carrera profesional tanto por el enorme valor patrimonial y artístico de lo que hemos recuperado como por el valor emocional de un proyecto que parte de todo un mecenas del arte y del patrimonio histórico como es el astrofísico Juan Naya”, comenta Martos sobre un proyecto que recibió el Premio Hispania Nostra a las Buenas Prácticas en la Conservación del Patrimonio Cultural, otorgado por la Asociación Hispania Nostra y la Fundación Santander.
Paco Luis Martos ostenta desde 2011 la Carta de Maestro Artesano que concede la Junta de Andalucía y es asesor de técnicos y arquitectos en la redacción de proyectos que incluyen el artesonado mudéjar como elemento constructivo. Pero su inquietud y su afán por innovar le lleva a reivindicar una mayor atención hacia este oficio casi milenario en peligro de desaparición, e incluso quiere promover un máster sobre artesonados mudéjares.
De alguna manera, Paco Luis Martos mantiene la vasta tradición artesanal de Úbeda, ciudad Patrimonio de la Humanidad y cuna de un puñado de maestros artesanos que ponen en valor un oficio que se encontraba casi extinguido a principios de este siglo.
Sin embargo, su principal fuente de inspiración le viene del afamado arquitecto y carpintero valenciano Enrique Nuere, considerado el principal especialista europeo en la carpintería de lazo, la carpintería de lo blanco y de armaduras de techo o techumbres. La obra de Nuere, con quien trabaja actualmente Martos, ha sido reconocida por su aportación a la arquitectura tradicional a través de sus obras de artesonado mudéjar y por el descifrado de las reglas geométricas originales plasmadas en los manuscritos de la carpintería del siglo XVII. Sus principales actuaciones se reflejan en los nuevos techos de las galerías del Palacio del Alcázar de Toledo, el paraninfo de la Universidad de Alcalá de Henares, el castillo de Cuenca o el claustro de las Claras de Salamanca.
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