El ‘fenómeno’ Luis Miguel vuelve a la pequeña pantalla
Netflix confirma el rodaje de la segunda temporada de la exitosa serie a partir de febrero
Luis Miguel: la serie, vuelve después de un año de parón y silencio. Los secretos sobre la vida del controvertido icono mexicano volverán a monopolizar los debates y conversaciones de una gran cantidad de hispanohablantes “enganchados” a los misterios nunca descubiertos de una de las figuras más importantes de la música latinoamericana.
Un año han tenido que esperar los miles de fans para la confirmación de la esperada segunda temporada de su serie. Netflix anunció su rodaje con un vídeo protagonizado por Diego Boneta y dirigido sobre todo a los seguidores de la estrella latinoamericana, que cada domingo de 2018 disfrutaron desde su sofá de pequeños fragmentos de la vida privada de uno de los cantantes más herméticos de la música latina. En febrero comenzará el rodaje en Ciudad de México: poco después, seguramente en el mismo año, el mito volverá a colarse en los hogares.
A pesar de las especulaciones sobre si se cambiaba al protagonista, Boneta continuará en el papel principal. En el primer adelanto se puede observar un cambio brutal del actor mexicano, que interpretará dos líneas de tiempo diferentes. Según la nueva apariencia del actor y las canciones que interpreta, la época se situará entre los noventa y principios de los 2000. Después de una primera entrega centrada en los inicios del artista, la nueva trama abarcará las dificultades a las que se enfrentó la estrella para sostener su vida familiar y profesional en pleno ascenso al estrellato. Hasta el momento no hay fecha concreta del estreno.
En el último capítulo de la primera temporada, un Luis Miguel desesperado visita a su odiado padre, Luisito Rey, en el lecho de muerte en un hospital de Madrid y le suplica que le cuente la verdad sobre la desaparición de su madre, Marcela Basteri, nudo principal de la primera entrega. Era el momento crucial. El que tanto esperaban los espectadores tras 12 episodios que habían marcado cada fin de semana desde su estreno. Faltaban apenas cinco minutos y Luis Rey, interpretado de manera magistral por Óscar Jaenada, muere. Tras un llanto intenso del cantante, su mánager, Hugo López, le revela que tiene un informe del Mosad. “Encontraron a tu madre”. La temporada acaba y nunca se descubrió el contenido del documento de López.
Luis Miguel: La serie, se convirtió en un fenómeno cultural en México y alcanzó una gran popularidad en todo el mundo hispano. Al sinfín de emociones que ya de por sí genera la estrella se unió la empatía hacia el artista por sus problemas familiares, amorosos, depresiones y soledad. El ídolo sufría los mismos obstáculos que la gente normal.
Fue tal el impacto que Luis Miguel, el original, fuera de la órbita mediática y los escenarios, con el ciclo de vida de las estrellas en fase de apagado, comenzó a utilizar la gran repercusión de su serie para catapultar de nuevo su carrera. El icono obtuvo sus mejores beneficios de taquilla de los últimos años, con giras por Estados Unidos, México y España que lo resucitaron de la racha de impopularidad y demandas millonarias que le acompaña últimamente.
Además de los réditos conseguidos por el cantante, plataformas como Spotify también cosecharon un beneficio abrumador. Según la aplicación, desde el inicio de la serie, las reproducciones de sus canciones aumentaron hasta en un 200%. Pero el tema que batió todos los records fue el de Culpable o no (miénteme como siempre), que apareció en el cuarto capítulo y tuvo un aumento del 4.000% de reproducciones, incluso se coló en la lista de las 50 canciones con más reproducciones de México.
Luis Miguel comprobaba así que su público nunca lo iba a abandonar. Una nueva generación que se sabe adicta al trap y al reguetón no solo ha empezado a tolerar sus canciones en fiestas, discotecas y karaokes, también ha empezado a acudir a sus conciertos y a interesarse por su vida. Y de no ser por la serie, nunca hubieran conocido.
