Pilar Palomero: “Con ‘Las niñas’ quiero que cada espectador reviva su paso a la adolescencia”

“Lo mío fue una vocación tardía”, reconoce Pilar Palomero. “Desde niña me gustaban las películas y escribir historias, pero fue a los 24 años cuando entré en la Escuela de cine de Madrid. No pensaba ser directora. Era algo que en mi generación apenas nos planteábamos. Empecé estudiando fotografía porque quería contar historias visualmente. Dirigí un primer corto que funcionó y así, poco a poco, llegué a realizar esta película que espero que sea la primera de otras más”, dice. Ese largometraje es Las niñas, que obtuvo el pasado fin de semana la Biznaga de Oro en el Festival de Málaga y que cuenta la historia de Celia, una chica que llega a la adolescencia cargada de dudas en la España de 1992.

El próximo domingo TCM ofrecerá una entrevista con Pilar Palomero que servirá, además, como arranque de Espíritu adolescente, una programación especial que, durante los domingos de septiembre, permitirá a los espectadores de este canal disfrutar de largometrajes que, como Las niñas, han reflejado la transición siempre difícil a la edad adulta.

Durante la conversación Palomero desgrana detalles y vivencias relacionadas con su ópera prima pero, además, comenta títulos de referencia de cineastas que admira, como Carrie de Brian de Palma. “Recuerdo haberla visto en la escuela de cine, pero está de plena actualidad porque es la historia de una chica que sufre acoso escolar”, señala. “No tiene nada que ver con Las niñas porque Carrie es una película de terror, pero sí que tiene algunos puntos en común con la mía. En las dos vemos a una madre represiva. Es verdad que la de Carrie es una fanática religiosa, pero en ambos casos esa actitud maternal opresiva afecta a la relación que la hija tiene con las compañeras de clase”, explica la directora.

Otro de los títulos que analiza es Los cuatrocientos golpes de François Truffaut, la historia de Antoine Doinel, ese chaval incapaz de adaptarse en el colegio y que, a la vez, se siente incomprendido y rechazado en su propia casa. “Es una de las grandes películas de la historia del cine”, afirma la cineasta. “Está llena de verdad y autenticidad. Tiene toda la picaresca del niño mezclada con la inocencia. Es un film que te enternece y que a la vez es muy duro. No me puedo imaginar a un espectador que no se emocione con ella”.

Antes de rodar Las niñas, Palomero vio todos los títulos que pudo que trataban el tema de la adolescencia y la iniciación. Muchas de esas películas, como Boyhood, Movida del 76 o An Education, se podrán ver los domingos de septiembre en TCM dentro de un especial, Espíritu adolescente, en el que todos los espectadores podrán verse reconocidos.