México se indigna ante un montaje de la ópera ‘Carmen’ que mezcla la Virgen de Guadalupe con la Santa Muerte
La cancillería critica en un comunicado que el Teatro de la Ópera de Roma se preste a reproducir “una visión burda, simplista y caricaturesca” de México
Una versión contemporánea de la ópera Carmen, con una cigarrera mexicana y un militar estadounidense como protagonistas, ambientada en un pueblecito de la frontera y salpicada de prostíbulos, contrabando, toros e imágenes de la Virgen de Guadalupe, ha despertado la indignación del cuerpo diplomático mexicano. La embajada en Italia publicó este viernes un comunicado dirigido al Teatro de la Ópera de Roma reprobando el estreno del montaje de la argentina Valentina Carrasco por “presentar una visión caricaturesca de nuestro país”.
La embajada calificó también de “burda y simplista” la representación que hace la obra de México y sus tradiciones. La embajada ya estaba en alerta antes incluso de su estreno este jueves. "Al enterarse de que se planeaba proyectar una imagen desfigurada de la Virgen de Guadalupe, ligándola al culto de la Santa Muerte, la embajada comunicó su extrañeza a la Superintendencia de la Fundación del Teatro de la Opera de Roma, la cual decidió modificar el retrato de esta figura central de México", reza el comunicado.
La versión de Carrasco se desarrolla en un pueblecito en la frontera entre Estados Unidos y México que tiene como escenario del primer acto un muro que divide los dos países, en los que se reconoce el rostro sin facciones del presidente Donald Trump. Durante la obra, Carmen es una cigarrera mexicana y don José, un militar americano que huye con ella por pasajes desérticos ganándose la vida como contrabandistas, acercándose a la trama original de la obra decimonónica de Bizet, ambientada en Sevilla, donde una joven mujer gitana seduce a un soldado que, en un arrebato romántico, género en el que se envuelve la obra, terminará suicidándose.
A lo largo de los actos, según información de la agencia EFE, el escenario de la versión estrenada en Roma se va transformando en un prostíbulo, por él que desfilan carrozas con la virgen de Guadalupe, calaveras gigantes, una iglesia y una corrida de toros durante el acto final.
La embajada afirma haber comunicado su opinión a la alcaldesa de Roma, Virginia Raggi, presidenta de la Fundación del Teatro de la Ópera, y ha "reiterado su plena disponibilidad para compartir información sobre la riqueza y complejidad que caracteriza la auténtica cultura mexicana".
La directora del montaje afirmó por su parte el día antes del estreno que la "dualidad de caracteres" es "muy importante para el personaje de Carmen, que viene de un contexto muy marginal". Además, equiparó esta dualidad a la situación en la que se encuentra el pueblo latinoamericano en Estados Unidos, donde "los peores trabajos los hacen generalmente latinos sin papeles" a los que representarían los mexicanos de su obra.
Babelia
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.