Líbano destierra a Wonder Woman

Wonder Woman no se exhibirá esta noche en Beirut. Dos horas antes de su estreno, previsto a las 20 horas locales de este miércoles (una hora menos en la península), el cine City Center recogía las carteleras tras una misiva del Ministerio del Interior libanés. Su proyección queda prohibida en todo el país y destierra de la gran pantalla libanesa a la actriz israelí Gal Gadot. Así zanjaba también el Ministerio la controversia despertada en los medios de comunicación esta semana y el acalorado debate que le siguió en las redes sociales.

La demanda la cursó el pasado 29 de mayo el Ministerio de Economía a pesar de que el filme no se inscribía en la lista negra de la Oficina para el Boicot Árabe a Israel, rama de la Liga Árabe y cuya sede actual radica en la capital Siria. “Podemos confirmar que varios cines han sido contactados por el Ministerio del Interior para cancelar su visionado”, dijo a este diario en Beirut Ayman Mhanna, director de la ONG Skyeyes que defiende la libertad de información.

Detrás de la carrera por impedir el primer visionado de Wonder Woman se encuentra la asociación Campaña de Boicot contra el Apoyo a Israel en Líbano (CBSI, por sus siglas en inglés). “No solo se trata de una actriz israelí, sino de una soldado que ha servido en las filas del Ejército israelí y de alguien que en su página de Facebook apoya públicamente los ataques a la Franja de Gaza y la ocupación Israelí. Es básicamente una portavoz del Estado sionista y de la ocupación”, cuenta a EL PAIS en Beirut Ramia Masri, miembro del CBSI. En las redes sociales, Masri calificó la prohibición de “gran victoria”.

La propuesta de censura fue depositada en la Oficina de Boicot en Beirut, quien informó al Ministerio de Economía y Comercio que a su vez se dirigió a la la Seguridad General. Fue finalmente el Ministerio del Interior el encargado de hacer pública la misiva. No sin antes hacer que los oficiales del boicot visionaran el largometraje. CBSI no logró sin embargo impedir que Batman versus Superman fuera censurada en 2013. Como tampoco lo fue Fast and Furious, a pesar de que Gadot actuó en sendos filmes. Sí fue cancelada en octubre de 2016 la proyección de la película Personal Affairs, dirigida por palestina Maha Hajj y producida por una sociedad israelí.

Ni Líbano ni Siria han firmado un acuerdo de paz con Israel, con los que mantiene esporádicos encontronazos, siendo la guerra de los 33 días en julio de 2006 la última librada entre el Ejército israelí y el partido-milicia libanés Hezbolá. A pesar de que 10.000 cascos azules internacionales han sido desplegados en el sur del Líbano —600 de ellos españoles— las escaramuzas son habituales y la línea de demarcación sigue siendo motivo de disputa con varios territorios en Líbano y Siria ocupados por el Ejercito israelí. Los activistas libaneses prometen seguir luchando por el boicot de los productos israelíes trasladando la guerra al ámbito cultural. Quieren frenar la normalización de las relaciones con el Estado hebreo a pesar de la tendencia de acercamiento que han adoptado la mayoría de los países miembros de la Liga Árabe.

A pesar de la controversia mediática, existe una reducida comunidad judía en Líbano. La única sinagoga que queda en pie en Beirut está siendo restaurada con apoyo gubernamental y el cementerio judío sigue abierto a las visitas de familiares.