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La Camorra escondía en Nápoles dos lienzos de Van Gogh robados en 2002

Los cuadros fueron sustraídos del museo dedicado al artista en la ciudad holandesa

'Vista del mar desde Scheveningen'.
'Vista del mar desde Scheveningen'.Museo Van Gogh

En una operación contra el tráfico internacional de cocaína que controla la Camorra, los agentes de la Guardia de Finanza italiana hallaron inesperadamente dos cuadros de Van Gogh robados el 7 de diciembre de 2002 del museo holandés dedicado al pintor y valorados en 90 millones de euros. Las obras estaban en la caja fuerte de una pequeña tienda de una localidad costera de la provincia de Nápoles, Castellammare di Stabia, muy cercana a Pompeya y famosa por su actividad criminal.

'Feligreses saliendo de la iglesia calvinista de Nuenen'.
'Feligreses saliendo de la iglesia calvinista de Nuenen'.MUSEO VAN GOGH

Las obras estaban en poder del clan camorrístico de los Amato-Pagano, que opera en el área metropolitana de Nápoles y en el barrio de Scampia, símbolo del crimen organizado y parte importante de las redes internacionales de contrabando de droga. En la operación fueron detenidas tres personas que, según los investigadores, forman parte de uno de los grupos criminales más peligrosos y activos de la Camorra, con importantes recursos económicos, personales y materiales.

Después de las comprobaciones realizadas las pasadas semanas por expertos en arte, funcionarios del Ministerio de Bienes Culturales italiano, con la confirmación del Museo de Van Gogh de Ámsterdam, la policía ha presentado hoy viernes los dos lienzos, Vista del mar desde Scheveningen (1882) y Feligreses saliendo de la iglesia calvinista de Nuenen (1884), pertenecientes a la primera época del artista, antes de su traslado a Francia.

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A pesar de haber estado desaparecidos 14 años y probablemente sin la conservación adecuada, ambos cuadros han aparecido en relativas buenas condiciones. Feligreses saliendo de la iglesia calvinista de Nuenen no presenta grandes desperfectos a simple vista, a excepción de unos pequeños daños en los bordes. Esta pieza representa a varias personas saliendo del templo donde el padre de Van Gogh ofició como pastor. El artista lo pintó para su madre, que acababa de romperse una pierna.

Sin embargo, Vista del mar desde Scheveningen (un lienzo de pequeñas dimensiones, 34,5 por 51 centímetros) sí está más dañado. La pintura en la esquina inferior izquierda se ha desprendido del lienzo en una superficie de alrededor de 5 x 2 centímetros. El óleo representa una escena del litoral cercano a La Haya, con un mar bravío y un cielo tenebroso. Algunos de los granos de arena que arrojaba el vendaval mientras Van Gogh pintaba la obra aún se conservan incrustados en la tela.

A la presentación de las obras recuperadas ha acudido el director del Museo Van Gogh de Ámsterdam, Alex Rüger, quien explicó que "los lienzos sirvieron para invertir el dinero obtenido a través de la venta de cocaína" y ha añadido que estaban en manos de "uno de los carteles criminales más temibles de Europa". Rüger ha manifestado su satisfacción porque los van gogh son auténticos "sin ninguna duda" y ha añadido que espera que lleguen "lo más rápido posible" al museo holandés. El responsable de la pinacoteca entiende, no obstante, que hay abierta "una investigación muy grande y los procedimientos que se necesiten deben ser respetados".

El de estos dos lienzos fue uno de esos robos de película, calificado por el FBI "en el top 10 de los mejores robos de arte". Los ladrones bajaron por una escalera, rompieron una ventana del tejado, se descolgaron por una cuerda hasta el interior, burlando las alarmas y a los vigilantes, y robaron dos lienzos del pintor holandés.

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