Morante de la Puebla reaparece y triunfa junto a El Juli en Aranjuez

Los diestros José Antonio Morante de la Puebla y Julián López El Juli, con dos y tres orejas, respectivamente, salieron a hombros en la tradicional corrida de San Fernando de Aranjuez (Madrid) en la que ambos se batieron mano a mano.

Con más de tres cuartos de entrada, se lidiaron dos toros -primero y segundo- de Victoriano del Río; dos -tercero y cuarto- de Alcurrucén, y otros dos -quinto y sexto- de Garcigrande, bien presentados en general y de variado comportamiento. Muy venidos a menos los dos primeros; encastados tercero y cuarto; bueno el quinto, de nombre Descorchador, número 59, premiado con la vuelta al ruedo; y noble y justo de fuerza el sexto.

Morante de la Puebla: pinchazo, media atravesada y dos descabellos (silencio); pinchazo, estocada y descabello (silencio); y buena estocada (dos orejas).

El Juli: pinchazo y media trasera (silencio); estocada trasera (dos orejas); y estocada trasera (oreja tras aviso).

Morante no estaba. O eso parecía, a juzgar por el escaso esfuerzo realizado en su primer toro, un ejemplar que tan solo aguantó dos tandas antes de venirse abajo. Algo más lo intentó en su segundo, pero fue más apariencia que realidad. El de Alcurrucén sembró cierto desconcierto en el tercio de banderillas, aunque el de La Puebla no se contagió de ese desorden, y logró sacar varios derechazos enroscándose a su oponente, si bien el trasteo nunca tomó vuelo.

Pero salió el quinto, de Garcigrande, y después de que El Juli cortara dos orejas en el cuarto, Morante puntuó. Ya en el recibo de capote meció las embestidas a la verónica; y con la muleta, su labor fue un deleite de toreo al natural, con tres en concreto largos y hondos. Maravilloso. Qué arte sin afectación, qué sabor, qué manera de inundar la escena con su torería.

Y de este modo, con un solo toro, y habiendo quedado casi inédito en sus dos primeros, el torero salvó su tarde.

El Juli, por su parte, fue todo arrojo y entrega. Su primero apenas duró dos tandas, y al cuarto, que fue encastado, le faltó ritmo. En este toro lo mejor llegó después de que el madrileño se encarara con un espectador, lo mismo que ocurriría en el sexto, contestando a un ‘ponte derecho’ con toreo mecido de mayor sutileza que el ejecutado en sus dos primeros oponentes.

Al final, los dos a hombros en una tarde en la que quedó claro que son dos grandes toreros.

Todos por la puerta grande en Ledesma

Los toreros Domingo López-Chaves, José Garrido y Andrés Roca Rey salieron por la puerta grande en la última corrida de la feria del Corpus de Ledesma (Salamanca).

El diestro local, López-Chaves, cortó una oreja a su primer oponente y del cuarto de la tarde se llevó los dos apéndices y el rabo en una sintonía total con el respetable y con el mejor astado. El pacense José Garrido le cortó las dos orejas a su segundo toro, al igual que el peruano Andrés Roca Rey, que se llevó las dos orejas del sexto.

Con el aforo casi completo, se lidiaron seis toros de la ganadería salmantina de El Puerto de San Lorenzo, y fue premiado con vuelta al ruedo el cuarto, de nombre Billetito, lidiado por Chaves.