Castella corroboró su buen momento y paseó una oreja en la plaza México

El diestro francés Sebastián Castella cortó una oreja de peso tras una faena en que hizo alarde de sitio, y fue el triunfador de la octava corrida de la temporada 2015-2016 en la Monumental Plaza México, en tanto que los mexicanos Eulalio López Zotoluco, Diego Silveti, que saludó en el tercio con petición de oreja, y el rejoneador Jorge Hernández Gárate se fueron en vacío.

Con unas trece mil personas en los tendidos, se lidiaron un toro de Marrón para rejoneo, que fue bueno, y seis del hierro Xajay, en la lidia ordinaria, bien presentados, salvo el sexto con menos presencia, desiguales en sus condiciones de lidia. Se movieron, pero les faltó fondo en líneas generales.

El rejoneador Hernández Gárate abrió plaza y protagonizó momentos lucidos, pero, al final, acabó muy mal con el rejón de muerte y el descabello y su labor fue silenciada.

Zotoluco toreó a la verónica superiormente al primero, y con la muleta realizó una faena reposada sobre la mano derecha, pero que careció de fondo y en la que el toro no se empleó. Pinchó varias veces y el balance se redujo a silencio. Ante el cuarto, un astado que no ofreció una embestida clara y fue muy deslucido, no consiguió interesar al público. Pinchó antes de cobrar una estocada, y escuchó alguna injustificada música de viento.

Sebastián Castella se lució con el capote en verónicas y un gran quite por chicuelinas. El trasteo con la muleta fue firme, haciéndolo todo y mostrando un gran sitio, siempre en la cara del toro. Acabó de una estocada trasera y se le concedió una oreja con petición de otra que no fue concedida. El quinto fue un astado con nulas posibilidades, deslucido y soso y, pese al viento, el diestro galo volvió a mostrarse decidido y seguro. Fue ovacionado tras un pinchazo y una estocada.

Diego Silveti estuvo bien con el capote con el tercero, y realizó una faena en la que su valor quedó demostrado, aunque con altas y bajas. Con la derecha logró sus mejores momentos y mató de buena estocada; parte del público pidió una oreja que no fue concedida. El sexto fue otro toro poco apto. Silveti intentó sacarle pases de mérito, sin obtener resultado.

Roca Rey, tres orejas en Mérida

El joven matador de toros peruano Andrés Roca Rey logró un triunfo importante en el coso Coliseo Yucatán de la ciudad de Mérida, en el sureste de México, al obtener tres orejas, en tanto que los mexicanos Arturo Macías y Octavio García El Payo no pasaron de discretos.

Con buena entrada, se lidiaron seis toros de Campo Hermoso, que fueron desiguales, y los dos toros más potables formaron el lote que sorteó Roca Rey.

Macías estuvo valiente ante el primero, pero mató mal, recibió dos avisos y escuchó silencio. Con el cuarto, trató por todos los medios de alcanzar el triunfo sin obtener su propósito, y fue ovacionado.

El Payo no tuvo suerte. Le tocaron los dos toros con menos posibilidades, y su entusiasmo se estrelló. Fue silenciada su labor en el segundo y se dividieron las opiniones en el quinto.

Roca Rey triunfa en todos lados, y Mérida no fue la excepción. Le cortó la oreja al primero por una faena brillante, y se superó en el sexto, del que paseó las dos orejas, y salió de la plaza en hombros con el pleno reconocimiento de los aficionados.