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Los debutantes de la Feria

Más de media docena de editores y libreros se estrenan en las casetas del Parque del Retiro de Madrid

Andrea Aguilar
Nuevos libreros y editores en la Feria del Libro de Madrid. De izquierda a derecha: Daniel Aubareda, Jenny Sánchez, Juan Melgar, Irene Álvarez, Alfonso Tordesillas e Imanol Bértolo.
Nuevos libreros y editores en la Feria del Libro de Madrid. De izquierda a derecha: Daniel Aubareda, Jenny Sánchez, Juan Melgar, Irene Álvarez, Alfonso Tordesillas e Imanol Bértolo.Gorka Lejarcegi

Son los recién llegados, pero con el barullo de público y los mostradores como refugio, la asimilación entre las 367 casetas montadas este año es tan rápida que su desembarco pasa casi inadvertido. El punto de partida de la docena larga de editores y libreros que se estrenan esta primavera en la 74 edición de la Feria del Libro de Madrid es francamente heterogéneo. Por ejemplo, arranca en una partida de billar entre tres amigos en Valladolid que resultó en la librería Tipos Infames de Madrid; en la centenaria visión de un jurista alicantino que montó en 1852 Reus, un sello editorial dedicado a esta materia; o en el traspaso de la histórica librería de Lavapiés Sonrisas de Papel y Blas a manos de dos jóvenes venezolanas. También hay historias vinculadas a la crisis que desembocaron en proyectos editoriales tan osados como ilusionantes y que inspiraron, entre otros, los sellos Valparaíso en Granada o A buen paso en Barcelona. Un grupo de fans donostiarras convencieron y financiaron a los diseñadores editoriales Montse Lago e Imanol Bértolo para que dieran el paso de publicar bajo un sello propio, Papeles Mínimos.

El eslabón que une trayectorias tan dispares es su aterrizaje en el Parque del Retiro, un hito que no pierde peso a pesar del advenimiento de los tiempos digitales. Todos venden libros por Internet y no son ajenos a la comunicación con su público por medios virtuales. Sin embargo, aprecian el contacto directo con los lectores a pie de caseta y la visibilidad que ofrece esta clásica cita libresca en Madrid, no exenta de sorpresas. Como la que se llevó Daniel Aubareda el lunes al encontrarse con la reina Letizia preguntando por una novela gráfica de Alan Moore en su caseta (99) Atom Cómics. Aubareda, bromea sobre el auge del género en el que están especializados y defiende que él vende “tebeos”, y uno de los que estos días más éxito está teniendo es El árabe del futuro (Salamandra) de Riad Sattouf. Su tardanza en estrenarse en el Retiro se ha debido, dice, a mala organización y su próximo paso será editar -“aunque somos pobres como ratas”-. Los precios por caseta oscilan entre poco más de 1.400 euros para librerías y 4.000 para organismos oficiales, pero a menudo lo que resulta más complicado es tener personal en la feria y mantener el local madre abierto. Juan Melgar se ha conseguido organizar y abrir la caseta 70 con los libros sobre tema marino que vende en Nautilus Robinson, la librería que recuperó del dueño anterior hace dos años. “Ya he tenido que reponer tres veces”, dice mientras señala como uno de los hits el título 22 derrotas navales británicas (Navamil), de Víctor San Juan.

Nuevos libreros y editores en la Feria del Libro de Madrid. De izquierda a derecha: Juan Melgar, Alfonso Tordesillas, Irene Álvarez, Jenny Sánchez, Imanol Bértolo y Daniel Aubareda.
Nuevos libreros y editores en la Feria del Libro de Madrid. De izquierda a derecha: Juan Melgar, Alfonso Tordesillas, Irene Álvarez, Jenny Sánchez, Imanol Bértolo y Daniel Aubareda.Gorka Lejarcegi

“La interacción con el lector, ver la mirada que tiene sobre tus libros, esto es algo realmente apasionante. El abanico de público es amplio”, asegura entusiasmada Arianna Squilloni de la editorial infantil A buen Paso (caseta 206). En línea con esto Irene Álvarez, de Lata de Sal editorial especializada en álbumes ilustrados con una línea dedicada a gatos, defiende que se trata de un gran escaparate que permite darse a conocer a pesar del barullo. Por eso quiso diferenciarse. Una moqueta verde, un mostrador abierto y banquetas de cartón decoran la caseta 188 que comparte con el veterano sello Corimbo. Los dos años y medio de andadura no han generado un catálogo suficientemente grande para que Lata de Sal viniera por su cuenta, el mínimo establecido por los organizadores de la feria para las editoriales que quieran una caseta es de 122 títulos. Más de 500 “vivos” tiene en su catálogo centenario Reus, pero nunca habían comparecido en el Retiro. Lo que les ha traído a la caseta 281 ha sido el lanzamiento de los cursos de formación online y conferencias: “Nuestros temas son monográficos para profesionales, y el público que se acerca es variopinto, desde funcionarios hasta aficionados a la criminología”, explica Iván Blanco y señala El derecho al olvido en Internet, de María Álvarez, y Elogio de los jueces escrito por un abogado, de Pietro Calamandrei como sus títulos más exitosos.

A falta de bar propio, bienvenida sea el agua fresca de botijo con unas gotas de anís. Esto fue lo que pensaron los dueños de Tipos Infames (caseta 338). “La nuestra no es una librería tradicional y en la feria hemos tratado de replicar nuestras mesas donde encuentras cosas actuales y otras que no lo son”, dice Alfonso Tordesillas. En total han traído casi 300 títulos y estrenaron sus firmas con Milena Busquets -“nuestra madrina”-, que también debutaba en la feria. Luis García Montero con el poemario Almudena dio el pistoletazo a Valparaíso, sello granadino de poesía que comparte caseta con Barbara Fiore y que este año también se presentará a la cita de diciembre en Guadalajara (México). “La feria de Madrid es más importante para un editor que para un librero porque te das a conocer”, dice Juan Bozalongo fundador de Valparaíso. Los más pequeños se muestran pacientes y confían a fondo en los libreros. “La feria es algo mediático pero es un ambiente en le que por unas cuantas semanas se habla de literatura. Te representa quién sabe vender tus libros”, sostiene Laura Huerga de Rayo Verde la editorial que está rescatando los libros de Juan José Saer. Y Papeles Mínimos presenta en exclusiva en Panta Rhei (caseta 127) 50 escritores, el libro de dibujos de autores realizados por César Fernández Arias y comentados por otros tantos escritores contemporáneos. “Una feria es una feria, hay de todo, mucha gente, está hecha para el paseante, pero en España cierran dos librerías cada día”, recuerda Bértolo.

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Sobre la firma

Andrea Aguilar
Es periodista cultural. Licenciada en Historia y Políticas por la Universidad de Kent, fue becada por el Graduate School of Journalism de la Universidad de Columbia en Nueva York. Su trabajo, con un foco especial en el mundo literario, también ha aparecido en revistas como The Paris Review o The Reading Room Journal.

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