Decouflé: ¿niño terrible a los 53 años?
El coreógrafo francés presenta en los Teatros del Canal 'Panorama', su última creación La pieza, que interpreta con su compañía, DCA, revive los hitos de su exitosa trayectoria
Casi siempre las biografías oficiales de Philippe Decouflé hacen hincapié en su deseo infantil de convertirse en payaso circense y en sus estudios en la escuela de mimo de Marcel Marceau. Sin que estos aspectos sean desdeñables, lo más señalado es su manera de insertarse en la naciente corriente de la nueva danza francesa a fines de los años setenta y principios de los ochenta del siglo pasado. Con una fuerte personalidad hilarante cerca de cierto Peter Pan particular, encantador en las maneras y de un físico elástico y privilegiado, el joven Philippe despierta el interés de Alwin Nikolais en el Centro Nacional de la Danza Contemporánea de Angers; conviene señalar que Nikolais había desembarcado allí poco antes, en 1978, por invitación expresa del ministro de cultura francés, a sabiendas de su capacidad formativa. Decouflé, que no había cumplido los 18 años todavía, pasa a formar parte del conjunto y el maestro lo manda a Nueva York a ver mundo y aprender.
En la Gran Manzana el chico toma cursos con Merce Cunningham y enseguida es reclutado en la plantilla de Karol Armitage; después lo cita a trabajar Regine Chiopinot. En 1983 gana el primer lugar del concurso coreográfico de Bagnolet con Vague Café (pieza que aún concurre en sus creaciones actuales). Ya había comenzado una carrera de éxitos muy variados que llega hasta hoy y que incluye desde la coreografía de parte del desfile de los 200 años de la Revolución Francesa, al cabaret Crazy Horse o las ceremonias de apertura y clausura de los Juegos Olímpicos de Invierno de Albertville (1992), obras de gran formato que han definido su estilo acrobático y amplia esfera de influencia.
Su relación dinámica con la moda (desde anuncios de perfumes a desfiles), los vídeo-clips musicales para estrellas actuales o su persistente vínculo con el circo (en 2001 hizo un memorable Cyrk para los alumnos de la escuela nacional de artes circenses) no le han impedido su vertical línea de creación dancística, de la que Panorama es la muestra más reciente y en más de un sentido, resumen. Especialmente triunfante salió de Tricodex para el Ballet de la Ópera de Lyon.
Panorama es una revisitación amable, humorística y creativa de sí mismo, un espejo convexo y coloreado donde también se citan sus influencias, desde el maestro Nikolais a Oskar Schlemmer.
Decouflé da las claves de ‘Panorama’
Deseo
Extractos
Variaciones
El elenco
Impresión final
“Quería trabajar con artistas jóvenes, centrándome en una serie de ideas que me gustaban. También quería regresar a esa energía particular de mis primeros trabajos. Después de todo, los cantantes repiten sus mejores canciones, ¿por qué no pueden los bailarines hacer lo mismo? Pero teníamos que ser cuidadosos con la elección de las partes, porque el tiempo ha pasado y ya no somos los mismos. El mundo ha cambiado. ¿Qué ha pasado con todos esos gestos? ¿Cómo se han mantenido con el paso del tiempo?”
"Los recuerdos personales y las emociones fueron la clave. Quería regresar a las creaciones que sólo unas pocas personas habían visto. Vague Café, por ejemplo, con la que ganamos la competición de Bagnolet en 1983 y que nunca había vuelto a salir a escena. Al igual que Jump, mi primer trabajo de vídeo-danza, que sólo representamos una vez. Es interesante comparar estas danzas —típicas de los 80, muy gráficas, con el estilo de un cómic— con trabajos posteriores más suaves, libres y fluidos, por ejemplo, Petites Pièces Montées y Decodex. He incluido también algunas 'cosas raras', más cercanas al circo en realidad, que habíamos explorado, por ejemplo, en trabajos como Triton, así como nuevas variaciones sobre los espejos y las sombras de las marionetas".
"Es un verdadero desafío recrear piezas de danza que dependen en gran medida de los bailarines originales… ¡y sólo queda uno de entonces, Christophe Salengro! Así, hemos cambiado la distribución de los papeles y hemos mezclado algunas partes de las coreografías. Por ejemplo, una sobra de Sombrero se abre paso dentro de un extracto de Triton con un traje inspirado en Shazam!... Todo esto se corresponde con la idea de una interpretación viva integral, que nos hace pensar en artistas como Alwin Nikolais y Oskar Schlemmer, donde la imagen, la música y el vestuario son tan importantes como la propia danza, con todos esos elementos participando en la reescritura de la pieza".
"Encontrar a las personas adecuadas es muy difícil, pero también resulta muy estimulante; si los intérpretes son los correctos, casi la mitad del trabajo está hecho. Y no es sólo suficiente con tener a los individuos adecuados, los intérpretes deben encajar entre sí para crear la magia. Todos ellos son buenos bailarines y la mayoría pueden también cantar, tocar un instrumento o actuar. Compartimos una sensibilidad artística y creamos vínculos y uniones entre las secuencias existentes. Panorama es una colección de variaciones sobre las formas anteriores, pero crear este mosaico es casi más complejo que crear un nuevo trabajo. Y, al final, destaca por sí sola como una producción independiente".
"Con Panorama, tengo la sensación de que he regresado a un gran apartamento en el que una vez viví, pero en el que ahora los muebles están colocados en un sitio diferente. Tenía unos 20 años cuando fundé la compañía DCA. Hace mucho tiempo de aquello, pero parece que hubiera sido ayer. Porque, en realidad, no importa si estoy trabajando en megaproyectos como los Juegos Olímpicos de Invierno de Albertville o en proyectos para mi compañía, siempre sigo haciendo el mismo trabajo. Con el mismo placer y con la misma curiosidad".
Babelia
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