Artistas y gestores culturales europeos afean al Teatro Real su trato a Mortier

Una veintena de artistas y gestores culturales internacionales han remitido al presidente del patronato del Teatro Real, Gregorio Marañón, una carta en la que protestan por el "irrespetuoso" y "nefasto" trato dado por ese coliseo a su anterior intendente, Gerard Mortier.

El destinatario aseguró ayer a Efe que no ha recibido tal misiva, que niega "la mayor", a saber, que Mortier haya sido "despedido" -ahora es el consejero artístico del Real- y que el texto, que ha conocido a través de Efe, es "apócrifo" porque no aparecen más que los nombres de los que la suscriben y no sus firmas.

El pasado 11 de septiembre, Marañón comunicó telefónicamente a Mortier, sometido desde hace más de cuatro meses a quimioterapia en Alemania, la decisión de su comisión ejecutiva de sustituirle por Joan Matabosch, aunque eso no significaba el "despido" de Mortier, con contrato hasta 2016.

A pesar de que dos semanas después quedaba sellada la paz con el anuncio de que Mortier gestionaría la actual temporada del Real junto al nuevo director, Jordi Matabosch, y de que sería consejero artístico del teatro, varios artistas y gestores artísticos han decidido remitir ahora una carta a Marañón para "dejar claro" que el procedimiento ha sido "del todo inaceptable".

Suscriben la carta la soprano Christine Schäfer, el director de orquesta Sylvain Cambreling, la violinista Isabelle Faust, el guitarrista Bill Frisell, el director de escena Robert Wilson, el artista Bill Viola, el coreógrafo Sascha Waltz, el director de la Bayerische Staatsoper de Munich, Nikolaus Bachler, el publicista Nike Wagner y el periodista Andreas Wilink.

También la suscriben el director del Deutsch-Französisches Institut Ludwigsburg, Frank Baasner; el director y presidente de la Deutsche Akademie der Darstellenden Künste, Hermann Beil, los coleccionistas Christian Boros y Gabriele Henkel, el director de la Staatsoper Unter den Linden Berlin, Jürgen Flimm, y el secretario de Estado de Cultura Hans-Heinrich Groe-Brockhoff.

Completan la lista los directores del PACT Zollverein Essen, Stefan Hilterhaus, del Festival de Berlín, Thomas Oberender, de la Opera de Stuttgart, Jossi Wieler, y del Ludwigsburger Schlossfestspiele, Thomas Wördehoff; el ministro de Cultura de Nordrhein-Westfalen, Peter Landmann y el presidente del Deutscher Bühnenverein y del teatro August Everding, Klaus Zehelein.

En su carta subrayan que el pasado 11 de septiembre, la Comisión Ejecutiva del Teatro Real "despidió" a Mortier, "sin preaviso y sin haber hablado previamente con él". "Las razones que se han esgrimido para su destitución y la forma en la que ha sido despedido son del todo inaceptables. Por tanto, queremos hacer patente nuestra protesta por el trato irrespetuoso y nefasto para el mundo del arte que se ha dado a una de las mayores personalidades del panorama artístico europeo", subrayan.

Mortier, recuerdan, ha consagrado, "desde hace más de 40 años", su vida "a fomentar que la ópera sea un género que continúe desarrollándose hasta ser considerada una forma de arte contemporáneo" y así lo demuestra su trabajo en Bélgica, Alemania, Austria, Francia y España.

"Gracias a su labor infatigable" convenció a "renombrados directores de escena" para que trabajaran con los directores y artistas "más inspirados del momento", "dando así un nuevo e inusitado impulso al teatro musical". Ha conseguido, sostienen, "colocar al Teatro Real" entre los de referencia de Europa "gracias al impacto de sus producciones, tanto desde el punto de vista musical como escénico".