Alumnos mucho más allá del Ego
Etxeberría sacude la tercera jornada de la Mercedes-Benz Fashion Week Madrid con una colección llena de ambición y personalidad
Las colecciones que más expectación despertaron ayer en la Mercedes-Benz Madrid Fashion Week (MBFWM) —las de Etxeberría y Rabaneda— tienen algo en común: ambas están firmadas por diseñadores salidos de la cantera del Ego, y no se venden en España. Dos hechos que hablan por sí mismos.
La propuesta del primero —construida en torno al punto, la napa y el pitón— transmitía una personalidad y una energía creativa desgraciadamente insólitas en la pasarela madrileña. En la primera fila, Brian Ang, consejero delegado de Kwang Sia, “uno de los holdings de lujo más importante de toda Asia”, tomaba buena nota de una colección primavera-verano 2014 en la que se dejaban sentir los estragos del cambio climático: botines abiertos, jerseys rematados en piel y abrigos en fieltro de lana cocida desagujada.
El diseñador vasco produce en España desde las perchas hasta el calzado (fabricado en Valverde del Camino), pero no cuenta con ningún punto de venta nacional. Su mercado está en Estados Unidos. Luego la pregunta se formula sola: ¿por qué, entonces, desfila en Madrid? Sobre todo si, como asegura, esta colección que ya ha mostrado en ferias de Las Vegas o Florencia está prácticamente vendida. “El apoyo de los medios españoles es fundamental. Además todo el material de vídeo y fotografía que generamos aquí es muy valioso”, argumenta antes de reconocer que Nueva York ronda ya por su cabeza.
Daniel Rabaneda, presente en boutiques de Seattle y Zurich, ha perdido esta temporada a sus clientes nacionales: “Los que no han cerrado tienen demasiado stock para comprar nuevas remesas”. Por eso confiesa que la colección de ayer era “decisiva, un punto de inflexión para que la marca siga o se caiga”. El andaluz no es solo uno de los diseñadores jóvenes con mayor instinto creativo sino también empresarial. Cuando puso en marcha su firma hace solo tres años contaba con la diputación de Sevilla como socio capitalista. Después —en escenario de crisis creciente— se retiró. Pero el modisto ha conseguido que la Secretaría de Turismo continúe apoyándole económicamente en proyectos puntuales, como el fashion film que ha rodado en la capital hispalense para presentar su último trabajo: Martes. Una propuesta donde las siluetas se simplifican para dejar todo el protagonismo a estampados acuáticos y geométricos. Además, su desfile ha sido el primero de la MBFWM en contar con la colaboración del gigante español de la joyería Tous. Aunque el maridaje entre complementos y prendas estaba muy lejos de funcionar.
Más allá de sus teatrales corsés, Maya Hansen presentó una pequeña colección de baño, quizá pensando ya en el mercado latinoamericano, al que pretende abrirse ante la caída de ventas en España. A finales de octubre participará en la semana de la moda de Puerto Rico y está ya en conversaciones con la de México. Su evolución y peso, junto al de Rabaneda y Etxebarría, certifican la importancia del Ego, la plataforma de creadores noveles, que nutre al calendario oficial de algunos de sus mejores reclamos.
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