El arte del Museo del Prado viaja por primera vez a Portugal
La pinacoteca firma un convenio con el Museo Nacional de Arte Antiga de Lisboa y lleva una muestra de los paisajes de Flandes y de Holanda en el siglo XVII a la institución lusa
El Museo del Prado llega a Portugal por primera vez. Y lo hace con la exposición Rubens, Brueghel, Lorena. El paisaje nórdico en el Museo del Prado, que transcurrirá desde el 30 de noviembre hasta el 16 de marzo de 2014. La pinacoteca española ha firmado un convenio con el Museu Nacional de Arte Antiga de Lisboa (MNAA), el más importante del país vecino, para que este exponga 57 obras de los más destacados maestros que el Prado atesora en las que se plasman los paisajes de Flandes y de Holanda en el siglo XVII. Así, afianza el programa Prado itinerante que tiene el fin de acercar sus colecciones fuera de su sede de Madrid. La muestra ya ha visitado Sevilla, Zaragoza y Palma.
Rubens, Brueghel, Lorena. El paisaje nórdico en el Museo del Prado está comisariada por Teresa Posada Kubissa, conservadora de Pintura Flamenca y Escuelas del Norte (hasta 1700). Entre los pintores elegidos para el Museu Nacional de Arte Antiga figuran los maestros más sobresalientes del género, con obras como Paisaje alpino de Tobias Verhaecht, uno de los mentores de Rubens; La vida campesina y Boda campestre de Jan Brueghel el Viejo, además de La abundancia y Los cuatro elementos que pintó en colaboración con Hendrick van Balen o Mercado y lavadero en Flandes con Joos de Momper el Joven; Paisaje con gitanos y Tiro con arco de David Teniers o los dramáticos Asedio de Aire-sur-la-Lys de Peeter Snayers y Bosque con una laguna de Jan Brueghel el Joven y taller. Miguel Zugaza, director del Prado, explica que la mayor parte de las obras que ahora componen la muestra formarán parte de las nuevas salas flamencas del siglo XVII, por lo que "ya no se podrán ver en su conjunto fuera del museo".
El director afirma asimismo que se sienten "ilusionados" con la oportunidad de colaborar con el MNAA y con su responsable, António Pimentel, "el verdadero impulsor de este acuerdo". "Parece mentira que hasta ahora los dos museos nacionales no hayamos encontrado un cauce estable de relación", agrega.
Además de esta exhibición temporal, las dos instituciones han acordado la realización de programas de intercambio, depósito de obras y préstamos. El primero de ellos será por parte del muso luso. El Tríptico de las tentaciones de San Antonio de El Bosco integrará la exposición monográfica que la pinacoteca española dedicará al artista en 2016 para conmemorar el V centenario de la muerte del pintor neerlandés.
La exposición y la llegada de la pintura a Madrid son por lo pronto "los dos hitos temporales" que marcan la cooperación, según Zugaza. "Lo interesante será llenar los próximos cuatro años con colaboraciones de orden científico, de conservación y otras actividades".
El Museu Nacional de Arte Antiga es la principal pinacoteca de Portugal. Fue creado en 1884 y alberga una importante colección desde los siglos XII al XIX. Incluye el mayor número de obras clasificadas como “tesoros nacionales” en su colección de pintura, escultura, plata, oro, piedras preciosas y artes decorativas portuguesas, europeas, africanas y orientales. Destacan los símbolos del arte portugués de los siglos XV y XVI como Los paneles de San Vicente de Nuno Gonçalvez y el Belém Monstrance, que fue un encargo del rey Manuel I realizado con el oro que trajo Vasco de Gama después de su segundo viaje a la India. El MNAA también acoge una importante colección de arte europeo, como Las tentaciones de San Antonio, San Agustín de Piero della Francesca, San Jerónimo de Alberto Durero, La Virgen con el niño de Hans Membling o El milagro de san Eusebio de Cremona de Rafael.
Babelia
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.