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María Escoté factura su colección más comercial y potente en la última jornada de la MBFWM Davidelfin gana el premio L’Oréal a la mejor colección de esta edición
A María Escoté le ha sentado muy bien entrar en contacto con los gustos y necesidades de sus clientas reales a través de la tienda online que abrió hace un año. Acotada por ese diálogo comercial, ha facturado su mejor colección personal y una de las más brillantes que se han visto en la Mercedes Benz Fashion Week Madrid que termina hoy. Sin perder un ápice de su inconfundible personalidad estética –siempre a caballo entre el rock y lo retro- propone piezas que aúnan realismo y emoción sin aparente esfuerzo. Sus vestidos de lentejuelas rosas con jerseys de malla metálica son el colofón de un proyecto más maduro y serio, aunque no por ello carente de ambición creativa. Recuerdo de que otra pasarela es posible, aunque parece poco probable. Porque aunque propuestas como la de Escoté deberían ser norma, constituyen la excepción entre un número inaceptable de desfiles perfectamente intercambiables, que pasan por la retina sin dejar casi huella en el tálamo cerebral.
El mejor de todos, para el jurado del Premio L’Oréal, fue el de Davidelfín. El creador, que cumplía 10 años en la pasarela madrileña, compartió el galardón recibido hoy con su truope: Bimba, Pelayo, Diego Postigo... La mejor modelo fue Alba Galocha, que además es bloguera de moda.
Las redes sociales y en especial las tiendas online se han confirmado como una herramienta especialmente eficaz para firmas de tamaño pequeño/medio como la de Escoté. Dos años después de cerrar su boutique de Madrid, la diseñadora catalana ha recuperado volumen de ventas mediante la web y, lo más importante, ha logrado captar la atención de tiendas internacionales como Luisa Via Roma, una de las más prestigiosas de Europa. Esta misma tarde pondrá a la venta parte de Canibal, la colección que acaba de presentar. En otoño, y en parte gracias al empujón web estará presente por primera vez en un showroom de París.
No es la única a la que Internet da alegrías en estos tiempos de crisis. También Maya Hansen ha entrado en contacto con potentes distribuidores en Polonio y Rusia mediante su web. Fue a través de esta misma plataforma como fue descubierta por los estilistas de Lady Gaga, que le encargarían el corsé que luego luciría la cantante en la mejor campaña promocional posible de su trabajo.
Amaya Arzuaga explicaba el sábado que además de ser muy rentable, su tienda online le permite hacer un estudio en tiempo real y muy afinado de sus clientas. “Las españolas compran sobre todo en rebajas y de pieza en pieza. Mientras que en el extranjero lo hacen de tres en tres. Además he descubierto que mi tercer mercado después del nacional y el chino, es el francés, algo que no me esperaba en absoluto”, contaba.
La boutiqu de TCN lleva solo seis meses en activo en Internet pero acaban de estrenar aplicación para el teléfono móvil. Allí podrá comprarse prácticamente todas las piezas que mostraron sobre la pasarela, fáciles y muy funcionales pero un tanto carentes de alma. Un poco en la línea funcional que abrió a media mañana Sita Murt, muy centrada, como siempre, en sus puntos fuertes: los tejidos y las siluetas cómodas.
Incluso Carlos Díez se unió a la corriente de piezas sencillas en parte de su colección y dentro de sus propios parámetros, claro. Presentó camisas de seda, batines y pantalones blancos con estampados de plumas.
Babelia
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