‘Performance’ anti-IVA
Más de 500 artistas y profesionales claman contra la subida del IVA frente al Reina Sofía El pintor Juan Uslé leyó un manifiesto suscrito por el sector ante Gordillo y García-Alix, entre otros
La cita era a las ocho de la tarde, pero una hora antes ya se podían ver muchas caras conocidas buscando sombra en los alrededores del Reina Sofía. La subida del IVA del 8% al 21% en las transacciones de obra de arte y la drástica reducción de los presupuestos para instituciones culturales, tienen más que caliente a un sector que lleva mucho tiempo sufriendo la crisis. Como en la concentración del pasado jueves, se recordaba que la cultura, lejos de ser un lujo, emplea (o empleaba) al 2,8% de la población activa. Juan Uslé, Luis Gordillo, Alberto García Alix, Navarro Waldebeg, Eva Lootz o Darya von Berner, fueron algunos de los creadores asistentes (muchos otros, como Miquel Barceló, se sumaron en la distancia). Entre los galeristas, Soledad Lorenzo, Juana de Aizpuru, Norberto Dotor o Heinrich Ehrhardt .
El escenario elegido fue la entrada principal del Museo Reina Sofía. Entre los ascensores de cristal, se agolparon creadores, galeristas, gestores y críticos con pancartas caseras confeccionadas a mano por Darya von Berner.
El acto en sí, duró unos quince minutos. Juan Uslé (Santander 1954), artista español residente en Nueva York y con obra en los principales museos del mundo, leyó un texto consensuado por todos los representantes del sector. Además del rechazo del IVA (Pasa del 8% al 21% y los artistas llegan hasta el 24%), los convocantes protestan contra la reducción del presupuesto a las instituciones culturales. Hasta que estas medidas no sean retiradas, los creadores anuncian que las protestas seguirán por toda España y que ninguno de ellos participará en actividades oficiales. “Nuestro trabajo profesional”, leyó Uslé “ y nuestra capacidad de contribuir a crear conocimiento, es imprescindible, que de forma conjunta y con una visión racional y global de la situación, respondamos cuanto antes a las medidas anunciadas por el BOE y exijamos al Ministerio de Cultura, Educación y Deporte la puesta en marcha de otras políticas, que no solo son posibles, sino sobre todo necesarias”. Añaden “que la actividad cultural española necesita ser impulsada, no arrojada al contenedor de material reciclable. “Desde el conjunto de los profesionales y empresas culturales reclamamos la unidad de todo el sector para hacer frente con la mayor fortaleza a este conjunto de medidas que van en contra de los intereses de nuestra soberanía como sociedad”.
Antes de la concentración, los asistentes hablaron de la frustración que vive el sector y el momento que sufre la sociedad española. Luis Gordillo señalaba que la situación es trágica. “Ahora quieren poner el IVA sobre un cadáver. Saben que el dinero no está en el negocio del arte. Es dramático porque este país se va a quedar sin nada”.
García-Alix pedía que los problemas del arte no se leyeran aparte de lo que sufre la población española en general. En su opinión, todas las medidas de ajuste son un disparate tristísimo”.
El galerista Heinrich Ehrhardt, alemán de nacimiento, con 15 años en Madrid, asegura que las medidas del Gobierno español dejan a artistas y galeristas a los pies de los caballos. “El negocio aquí iba mal y no queríamos ni hablar de ello entre nosotros. Como si diera mala suerte, pero estaba muerto. Lo vimos claro en el último ARCO. Ahora estas medidas nos rematan porque comprar obra de nuestros artistas en Alemania tendrá un IVA del 7%. ¿Por qué van a comprar aquí?”.
Juan Uslé, a título personal, resumió el estado de ánimo general diciendo que si estas protestas no sirven, tendrán que aumentar el grito y no parar hasta quedarse afónicos”.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.