Yo fui académico
Hace unos años, sin más ni más, empezaron a llegar a mi buzón de correo invitaciones para participar en los Premios de la Música. Básicamente se trataba de una contraseña que daba acceso a una página web. Allí había una exhaustiva lista de categorías. En cada una, una ristra de candidatos que se antojaba inacabable de los que había que elegir, si no recuerdo mal, un máximo de tres. No era necesario contestar a todas, cosa muy de agradecer, porque categorías como Mejor canción en asturiano o Mejor edición de música clásica escapaban por completo a mis conocimientos. Aun así, rellenar aquello llevaba horas. Un tiempo después (hubieras o no contestado al primero) llegaba otro correo para votar a los finalistas. Las categorías eran igual de largas pero los candidatos habían quedado reducidos a una terna.
En 2011, fascinado por cosas como que el de Kiko Veneno fuera el mejor álbum de pop alternativo del año o que Macaco recibiera el premio a mejor álbum de pop, decidí informarme. Encontré un mail, escribí, y rápidamente una representante de la academia se puso en contacto conmigo. Me contó que había alrededor de 5.300 académicos. Los primeros, entre los que al parecer me encontraba, habían sido elegidos por los fundadores, aunque cualquiera que cumpliera unos requisitos podía postularse. En teoría el mayor número de solicitudes llegaba después de cada edición. No supo decirme cuántos de ellos votaban, porque eso era un dato que solo conocía el notario. Tampoco si hacía falta un determinado número de participantes para que hubiera quorum, con lo que en algún caso un premio podría quedar desierto. Sin haber resuelto la mayoría de las dudas telefoneé a una amiga, representante de artista, uno de cuyos clientes había ganado uno de los premios en 2010. Quería saber si eso había significado algo para él a efectos prácticos. La respuesta fue rotunda: no. En su opinión el galardón no le había ayudado a vender ni un disco más. Tampoco había aumentado las contrataciones de conciertos. “De hecho”, dijo, “ni siquiera se notó en cuanto a la repercusión en los medios. Esperaba que nos llamaran para pedir entrevistas, pero ni eso”.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
¿Tienes una suscripción de empresa? Accede aquí para contratar más cuentas.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
Archivado En
Últimas noticias
Al menos 13 muertos al descarrilar el Tren Interoceánico en Oaxaca
El nacionalista Albin Kurti, actual primer ministro de Kosovo, gana las elecciones con holgura
Al menos 13 muertos al descarrilar el Tren Interoceánico en Oaxaca
Kyrgios gana la falsa batalla de los sexos del tenis a Sabalenka en Dubái
Lo más visto
- Europa entra en estado de alerta ante la embestida estratégica de Trump
- ¿Qué pasa si uno solo de los ganadores del Gordo de Villamanín decide denunciar?
- Los grandes derrotados del Gordo de Navidad de Villamanín, 15 jóvenes de entre 18 y 25 años: “Hoy hemos perdido amigos”
- La larga sombra del hijo único: China paga con una crisis demográfica su mayor experimento social
- El giro del PP con Vox: de prometer no gobernar con la extrema derecha a normalizarlo tras el resultado en Extremadura




























































