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CÁMARA OCULTA
Columna
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Siempre Erice

Una extraordinaria novedad es la edición en DVD de dos joyas de Víctor Erice, inéditas en este formato, Alumbramiento (2002) y La morte rouge (2006), de 11 y 34 minutos, respectivamente: dos películas fascinantes, imprescindibles, que fueron realizadas para proyectos dispares. La primera para el largometraje Ten minutes older, en el que también participaron otros destacados directores, pero que en España, aparte de su presentación en el festival de San Sebastián, nunca se ha exhibido por incomprensible decisión de sus distribuidores. La segunda, conocida en la exposición Erice-Kiarostami, correspondencias, es un bellísimo soliloquio sobre el personal descubrimiento del cine que vivió el autor allá por enero de 1946, en el que evoca aquel tiempo y la película que le cautivó y le asustó, La garra escarlata, de una serie de Sherlock Holmes, que en este caso se desarrollaba en un ficticio pueblo canadiense precisamente llamado La morte rouge. No hay manera fácil de describir la mágica cadencia poética del relato, la fascinación con que Erice rebusca en los significados de su "inocencia primera", y del ambiente social de una población de posguerra, emocionalmente aterida, como él mismo dice. Hay que dejarse llevar por el atractivo de su discurso fílmico cuando nos habla de la niñez, del miedo, del sentido del tiempo, de la memoria, de la magia del cine y del arte, de "las películas que han mirado nuestra infancia...".

El DVD incluye un making of de Alumbramiento, además de una larga entrevista con el mismo Víctor Erice realizada por Manuel Asín, en la que el director reflexiona con calma sobre aspectos de aquella época y de su propia obra, tan admirable como lamentablemente breve, aunque él, en libertad, en silencio, rodando incluso en solitario, sigue trabajando a su manera, produciendo de tarde en tarde obras de la importancia de estas dos, que por fin tienen la oportunidad de ser conocidas por todos. ¿Cuántas otras joyas esconderá Erice en su estudio, cuánto tiempo tendremos que esperar para conocerlas?

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