Miguel Ríos dice adiós rodeado de amigos
El rockero inicia su última gira en la sierra de Gredos
En el verde marco del festival Músicos en la Naturaleza 2009, se inició la noche de este sábado la gira de despedida del único pionero del rock and roll español que se mantiene en activo. Los casi 30 grados de temperatura que calentaban el ambiente antes del concierto no fueron impedimento para que alrededor de 8.500 espectadores, de todas las edades, se agolparan en la sierra de Gredos (Ávila) para dar un adiós al cantante Miguel Ríos (Granada, 1944). Sus amigos, Ana Belén, M Clan, Los Secretos, Rosendo, Celtas Cortos, Revólver, entre otros artistas, le acompañaron en el inicio de esta última gira que lleva por nombre Miguel Ríos y Amigos.
Los seguidores del cantante granadino esperaban horas antes, con una mezcla que viajaba entre la impaciencia y la nostalgia, esta última oportunidad para ver y escuchar en directo las canciones que han disfrutado casi cinco décadas. Entre ellas: Santa Lucía, El rock de una noche de verano o Bienvenidos. Uno de los asistentes, Jesús Muñoz, que había viajado desde Segovia, tiene todos los discos del artista, tanto en elepé como en CD, pero nunca había "pillado" al cantante en concierto. "Escuchar la música de Miguel Ríos es como oír la banda sonora de mi vida", afirma.
Los últimos meses están siendo muy especiales para el cantante granadino. A finales de 2008 se editó un nuevo disco, Solo o en compañía de otros, en el que el músico publicaba nuevas grabaciones junto a otras que ya habían aparecido en discos ajenos. El pasado mes de junio, muchos de los mejores cantantes españoles editaron Bienvenidos,, un álbum en el que rendían tributo al rockero cantando sus temas.
La música de Miguel Ríos ha acompañado la vida de los españoles desde los días de la dictadura hasta hoy. Por eso Eva, una mujer que asistió al concierto, dijo recordar haberlo visto "en la televisión, cuando era en blanco y negro. Entonces se hacía llamar Mike Rivers, con patillas largas y pantalones de pata elefante". En 1969 el joven artista se hizo popular al vender siete millones de discos con su interpretación de El Himno de la Alegría.
Son 47 discos en casi medio siglo, en los que el artista también se ha ganado el cariño de un público de todas las edades. Por algo sus amigos lo siguen acompañando para cantar. "Niño, tú no vayas a hacerte viejo en un escenario. No hay cosa más fea". Con este consejo de madre llevado al pie de la letra, Miguel Ríos decidió el pasado mes de mayo despedirse musicalmente de manera pausada pero firme, y poner así un punto final a casi cinco décadas de una vida profesional dedicada a la canción.
Babelia
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.