Faye Dunaway: "Amo a Almodóvar"

Si los aguaceros lo permiten, el glamour de la Croissette también se podrá disfrutar en Almería. Faye Dunaway, la protagonista de clásicos de la talla de Bonnie & Clyde (Arthur Penn, 1967) o Chinatown (Roman Polanski, 1974), acaba de aterrizar en España. Viene del Festival de Cannes a recoger el premio honorífico Almería, Tierra de cine que otorga la presente edición del certamen de cortometrajes Almería en corto. En conversación telefónica, la ganadora de un Oscar habla sobre su pasado como actriz, su presente como productora, Pedro Almodóvar y... Julio Medem.

Pregunta: Ha regresado a Almería 36 años después de rodar Duelo en OK Corral (Frank Perry, 1971). ¿Cómo le sienta el regreso?

Respuesta: Almería es una cuidad muy importante para el cine. Exceptuando Italia y Estados Unidos, no tendríamos ni la mitad de los westerns que existen hoy en día si no fuera por Almería. Por lo tanto, para mí es muy importante estar aquí después de tantos años.

P: En el festival Almería En Corto 07, además de recibir un premio honorífico, va a presentar el corto The Yellow Bird que rodó, escribió y protagonizó en 2001 basándose en la obra homónima de Tennessee WIlliams. ¿Qué nos puede decir de la pieza?

R: Tennessee Williams trataba sobre todo de mujeres. Creó a las grandes heroínas de todos los tiempos y hay muchos puntos de vista que puedes adoptar. Sin embargo, soy una mujer del sur y es la clase de mujer sobre la que Tennessee escribió. Por lo que creo que aporto un punto de vista distinto de lo que la gente suele ver en sus adaptaciones. Es muy importante saber sobre lo que se escribe, llevarlo en la sangre.

P: Su filmografía está repleta de mujeres todoterreno, pero con un fondo vulnerable. Algo así como los personajes femeninos de Pedro Almodóvar. ¿Está de acuerdo?

R: Sí, ¡eso espero! Es un gran piropo. Almodóvar es uno de mis directores favoritos en todo el mundo. Y un gran amigo que ocupa un importante espacio en mi corazón. Amo a Almodóvar.

P: Bonnie & Clyde y Chinatown se han convertido con el tiempo en grandes clásicos de Hollywood. Pero, ¿cree usted que sería posible hacerlas en el Hollywood de hoy en día?

R: Sí, claro. Pero en el mundo del cine independiente. Esas dos películas se hicieron antes de que George Lucas redefiniera el sistema de los grandes estudios con La guerra de las galaxias (1977). Se pasó muy rápidamente a la ecuación de cuanto más inviertas, más ganancias tendrás. Hoy, el joven director independiente busca financiación privada fuera de los estudios y es retribuido dependiendo de como funcione la película. Es una forma distinta de hacer cine, más en plan guerrilla. Me recuerda al cine europeo que es más innovador y valiente.

P: En ese cine independiente, ¿en quién se fija?

R: Hay muchos cineastas jóvenes e innovadores de los que podemos aprender algo. Alfonso Cuarón, Alejandro González Iñarritu, David Fincher y aquel director de Lucía... ¡Julio Medem!.

P: Desde finales de los ochenta, ha dejado de lado la actuación y se ha centrado en la producción. Empezó a producir por vocación, inspiración, necesidad...

R: Desde que hice Bonny & Clyde, siempre quise producir. Pero, hay que encontrar el bueno momento para tomar todas las riendas de lo que haces. Siento que estoy lista para ello ahora, he aprendido mucho, he estudiado mucho y he decidido concentrarme en ello. Producir y dirigir. Eso creo que es lo mejor para mí.

P: Su filmografía da un poco de vértigo: ha trabajado con los más grandes de Hollywood. De todos y todas, ¿con quién se quedaría?

R: Steve Mcqueen, Jack Nicholson, Robert Redford, Elia Kazan... he aprendido mucho de todos ellos. Pero, si tengo que elegir sólo a una persona que haya significado algo realmente importante en mi carrera elijo a Arthur Penn que me dio la oportunidad de protagonizar Bonnie & Clyde cambiando así mi vida.

P: ¿Se siente cómoda con la etiqueta de una de las grandes actrices de los sesenta?

R: (silencio). Sí. Me siento afortunada. Significa mucho para mí pues eso quiere decir que la gente valora lo que he hecho. Llegar a algún tipo de reconocimiento es importante. Aunque también es muy importante no parar de aprender todos lo días de la gente que te rodea.