El actor estadounidense Charles Bronson fallece en Los Ángeles a los 81 años

El actor estadounidense Charles Bronson, protagonista por excelencia de películas de acción y uno de los últimos hombres duros de Hollywood, falleció el sábado a los 81 años de edad en Los Ángeles debido a una neumonía por la que llevaba cuatro semanas ingresado en estado grave en el hospital Cedars-Sinai, según ha anunciado hoy su agente, Lori Jonas. Bronson padecía además Alzheimer desde hace dos años.

Nacido el 3 de noviembre de 1921 en la ciudad minera Ehrenfield (Pensilvania) con el nombre real de Charles Buchinsky, era el décimo primero de 15 hermanos nacidos en el seno de una familia de inmigrantes -su padre era ruso y su madre, lituana- muy pobre. La temprana muerte de su padre, cuando él tenía sólo 10 años, le llevó a trabajar en los más variados oficios antes de dedicarse al cine, aunque su primer destino parecía estar en las minas, ocupación de su padre y de varios de sus numerosos hermanos y en la que comenzó a los 16 años.

Tras conocer algo de mundo como tripulante de bombarderos en la II Guerra Mundial, decidió no volver a la pobreza de su ciudad natal y tomó clases nocturnas de declamación e interpretación en el conservatorio de Arte Dramático Pasadena Playhouse. Animado por el dinero que ganaban los actores, se enroló en diversas compañías de teatro de Pensilvania y California, donde algunos productores le echaron el ojo para telefilmes de acción. Sus rasgos secos y su voz callosa le permitieron desde 1951 conseguir numerosos papeles secundarios como hombre duro y resuelto y, a finales de los años 60, ya era un clásico secundario en títulos de gran envergadura.

El vengador sanguinario

Siguiendo los pasos de Clint Eastwood, a comienzos de los 70 se embarcó en una serie de películas realizadas en Europa, muchas de ellas spaguetti western, que le permitieron subir un peldaño en el escalafón y volver a Hollywood convertido en una estrella. En total, rodó 97 películas de cine o telefilmes, así como series de televisión como Bonanza, casi siempre como rudo vaquero, bandido, soldado, asesino a sueldo o, su especialidad, vengador sanguinario contra malvados criminales. De ellas, destacan los clásicos Los siete magníficos (1960), La gran evasión (1963), Doce del patíbulo (1967).

Sin embargo, debe gran parte de su fama a la serie de cinco largometrajes en los que dio vida a Paul Kersey, un honrado hombre de familia al que un grupo de delincuentes arruina su vida. Ante el abandono de las autoridades, Kersey acaba tomándose la justicia por su mano. La saga comenzó con El justiciero de la ciudad (1974), a la que siguió Yo soy la justicia (1981), ambas dirigidas por Michael Winner. Estas películas estuvieron rodeadas de una cierta polémica debido a su violencia explícita y su concepción política. Bronson siempre defendió sus encarnaciones, ya que consideraba que el ciudadano estaba indefenso frente a la inacción de las autoridades contra el crimen.

Además, Bronson apareció en más de una docena de largometrajes con su segunda esposa, Jill Ireland, que murió de cáncer de mama en 1990. En la vida real, Bronson era tan esquivo como muchos de sus personajes y rehuía la vida de glamour de Hollywood, más aún tras la muerte de Ireland, que le sumió en una profunda depresión. El actor estaba acompañado en el momento de su muerte en el Cedars-Sinai por su tercera esposa, Kim, según ha explicado su representante. "Deja a seis hijos y dos nietos. Era un padre encantador y un actor maravilloso. Se le echará mucho de menos", ha añadido Lori Jonas.