El otoño se vuelve “extremadamente cálido” y húmedo

Los efectos del cambio climático y el calentamiento global se ven reflejados en la Comunidad de Madrid, con unas temperaturas cada vez más altas. El otoño de este año ha sido cálido en Navacerrada, con temperaturas de 1 grado centígrado superiores a la media, mientras que en Retiro ha sido el sexto otoño más cálido desde comienzos del siglo XXI por detrás de los que se vivieron en la misma época del año en 2014, 2011, 2006, 2009 y 2017, respectivamente, según ha explicado el delegado territorial de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) en Madrid, Cayetano Torres.

Concretamente, el mes de septiembre fue muy cálido, “algo que provoca que el verano sea más largo de lo normal, como viene pasando ya en los últimos años”, explicó ayer Torres. En Barajas y Getafe fue “extremadamente cálido” y en Retiro, Navacerrada y Cuatro Vientos fue el segundo mes de septiembre más caluroso después de 1985, con temperaturas 3 grados centígrados por encima de la media. En octubre la temperatura pasó a los valores “normales”, según la terminología que utiliza la Aemet, que diferencia entre cálido, normal, frío, húmedo o seco. En noviembre se repitieron los mismo parámetros, y fue un mes de nuevo cálido en toda la región, con la excepción de Navacerrada, que se consideró frío.

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Torres indicó también que durante 2018, en la Comunidad de Madrid, a falta de los datos de diciembre, va camino de convertirse en un año “extremadamente cálido”, con una temperatura media de 16,3 grados centígrados, y “extremadamente húmedo”, con unas precipitaciones de 577,8 litros por metro cuadrado.

En cuanto a las precipitaciones, el otoño ha sido húmedo en Navacerrada, aunque en septiembre fue seco, algo común en esas fechas. Octubre ya entró en parámetros que se consideran “normales” y noviembre fue un mes “muy húmedo”. En Retiro también ha llovido este otoño, concretamente 37 días, siendo el día de mayor precipitación el 4 de noviembre, con 17 litros por metro cuadrado. Torres también aportó datos del año hidrológico y precisó que los embalses en la región se encuentran al 72% de su capacidad, por encima de la media, situada en el 63%, lo que supone “una buena noticia”, puesto que hay más agua de lo normal para esta época.