Jordi Sànchez le pide a Quim Torra que se reúna con el Gobierno el 21-D
ANC y Òmnium garantizan que sus movilizaciones serán "absolutamente pacíficas"
"Desde la prisión de Lledoners animo al presidente Torra, al vicepresidente Aragonés y a la consejera Artadi a crear las condiciones para facilitar una reunión con la delegación del Gobierno español el próximo jueves 20 o el viernes 21". Así empieza la carta que ha escrito Jordi Sànchez, en prisión preventiva y en huelga de hambre desde hace 16 días, y que ha hecho pública esta mañana Catalunya Ràdio. "El diálogo nunca puede ser considerado como una expresión de debilidad", añade el diputado y presidente de Junts per Catalunya. "Este encuentro es compatible con la existencia de una gran movilización pacífica y no violenta en las calles de Barcelona para protestar contra la presencia del Consejo de Ministros el viernes 21 de diciembre".
Eduard Pujol, diputado y portavoz del mismo grupo, ha garantizado que la reunión entre los dos presidentes se celebrará si se encauza para que el diálogo "sea útil". "Si es un diálogo para hacer una foto, es más dudoso", ha advertido. El portavoz ha insistido en que Sánchez tiene una oportunidad de aceptar a Cataluña como actor político. "Eso seria un gesto de realismo", ha dicho abonando la idea de nuevo un cumbre con ministros y consejeros ya descartada por La Moncloa. "Pero más allá del formato, el derecho a la autodeterminación no debe asustar a nadie. Sería muy buena noticia reconocer a Cataluña como sujeto político. El tiempo es oro. No necesitamos más fotos y si capacidad de afrontar la situación con realismo y coraje".
Ciudadanos pide garantizar la seguridad del Parlament
El grupo de Ciudadanos ha anunciado que registrará en el Parlament sendas peticiones al presidente de la Cámara, Roger Torrent, y al consejero de Interior, Miquel Buch, para que garanticen y velen el viernes la seguridad de la institución. Carlos Carrizosa, portavoz del partido, ha afirmado que en las redes sociales ha visto llamamientos de grupos para intentar asaltar la cámara en la misma línea del primer aniversario del 1 de octubre. El grupo presidido por Inés Arrimadas se opone a la reunión Sánchez-Torra y ha señalado que la vía es que el presidente del Gobierno requiera al catalán si está dispuesto a cumplir las leyes como paso previo a la aplicación del 155. Ciudadanos ha dibujado hoy el perímetro de cómo se debería realizar de nuevo a suspensión de la autonomía y ha invitado al Ejecutivo a que debería fijar su atención en TV3 y los Mossos d'Esquadra, que no fueron intervenidos por Mariano Rajoy. "Consistirá en lo que determine el Gobierno pero queremos que se garantice la neutralidad en los espacios públicos; que no tengamos una "policía política" influida por el Govern y que los medios públicos sea imparciales y neutrales.
Junts per Catalunya ha apoyado todas las movilizaciones pacíficas que se puedan celebrar el día 21 y ha puesto como ejemplo la del 3 de octubre de hace un año, dos días después del referéndum, cuando hubo una gran protesta y una huelga general sin que se produjeran incidentes. "Hubo una marea humana que lo desbordó todo. Y combinamos fuerza reivindicativa con un actitud cívica", ha dicho Pujol apuntando que se deben "aislar" siempre a "los violentos". La presidenta de la Assemblea Nacional Catalana (ANC), Elisenda Paluzie, y el vicepresidente de Òmnium Cultural, Marcel Mauri, han garantizado que sus movilizaciones serán "absolutamente pacíficas" y han dicho que "la única violencia" vivida en Cataluña ha sido la de la extrema derecha y las cargas policiales del 1-O.
Las dos entidades soberanistas parten de la premisa que la celebración del Consejo de Ministros es una "provocación" y han organizado actos: la ANC ha llamado a colapsar la ciudad con una marcha lenta de vehículos y Òmnium organizará, muy cerca de la Llotja, un "Consejo Popular de Ministros" para contraprogramar el cónclave del Ejecutivo. En declaraciones a Catalunya Ràdio, Paluzie y Mauri han recordado que las organizaciones que representan nunca han apelado a la violencia y que siempre se han expresado "de forma pacífica en las calles". Mauri ha definido su acción de protesta como una manera de mostrar rechazo al Gobierno "de forma pacifica, contundente y determinada", ya que ante la actual situación -con presos, dirigentes independentistas huidos para evitar la acción de la Justicia y el rechazo a la autodeterminación- "lo mínimo que se puede hacer es salir a la calle".
Paluzie ha asegurado que el 21-D "no será un día normal" ya que es "importantísimo que la ciudadanía demuestre que este Gobierno del Estado no es bienvenido en Cataluña", por lo que ha pedido hacer notar el rechazo de la ciudadanía con "una movilización contundente y pacífica". Paluzie, que ha criticado que el Ejecutivo "venga aquí como durante el franquismo", ha dicho que el Gobierno de Sánchez se ha instalado en un "imaginario" del Consejo de Ministros por las provincias, "como si no hubiera pasado nada". Mauri y Paluzie han defendido que aunque cada entidad busca "un acento distinto", siempre se coordinan y apoyan de forma mutua, y en relación a los Comités de Defensa de la República (CDR) han señalado que es más complicado tratar con ellos, pues no tienen un portavoz claro y cada asamblea territorial tiene autonomía, pero han defendido que "siempre han actuado desde la más estricta no-violencia".
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