El Ministerio considera “prioritario” recuperar cinco figuras de la arqueta de Banyoles
El Estado, tras adquirir 21 esculturas robadas, pagará también las dos últimas localizadas
La recuperación de las cinco figuras de plata de la arqueta de Sant Martirià de Banyoles (Pla de l'Estany) que faltan localizar de las 28 que fueron robadas en 1980 por Erik el Belga “es prioritaria porque son piezas excepcionales”, aseguró ayer el director general de Bellas Artes del Ministerio de Cultura, Román Fernández-Baca. El político que visitó esta joya gótica del siglo XV en el monasterio de Sant Esteve de Banyoles, se comprometió, como hizo su antecesor, a, mediante una colaboración con el Obispado de Girona, hacerse cargo del coste de la adquisición de las dos estatuillas de Santa Ana y San Cristóbal localizadas a mediados de año en Londres y Bruselas.
De esta manera, el Estado será quien habrá pagado el coste de las 23 estatuillas de plata recuperadas hasta el momento. Entre 2005 y 2010 se recuperaron 21 de las figuras gracias al patrocinio de la desaparecida Caja de Ahorros del Mediterráneo que pagó en concepto de dación en pago 550.000 euros al Ministerio de Cultura. En cuanto al precio de la compra de las dos últimas, el abogado del Obispado, Carles Mascort, responsable de localizar las figuras de aquel robo y de las negociaciones para recuperarlas, ha reiterado en diversas ocasiones que no se quiere hacer público para no entorpecer futuras negociaciones con quien tenga en su poder las cinco piezas que faltan. De ahí el “hermetismo” y “máxima discreción”.
Las dos últimas piezas recuperadas en abril se encuentran en buen estado, no obstante, Fernández-Baca ha asegurado que antes de finales de año técnicos del Instituto del Patrimonio Cultural del Ministerio viajarán a Banyoles para comprobar su estado y determinar si su restauración se puede hacer en Banyoles o se tienen que trasladar a Madrid. Una vez restauradas se colocarán en su lugar, en la considerada joya gótica del siglo XV, expuesta desde 2014 en la Sala de la Arqueta en el patio del monasterio de Sant Esteve “en unas condiciones de conservación preventiva asegurada desde el punto de vista ambiental”. La arqueta, creada en el taller gerundense de los Artau, se encuentra expuesta en una vitrina de cristal climatizada y con una iluminación especial encargada a una empresa especializada alemana.
René Alphonse Ghislain van den Berghe más conocido como Erik el Belga (Nivelles, Bélgica 1940), el más prolífico ladrón de arte de Europa del siglo XX, el 11 de enero de 1980 se llevó junto a su banda las 28 figuras de plata de la arqueta que contenía los restos de Sant Martirià. Entre 2005 y 2010 se consiguieron recuperar 21 de las figuras y este año otras dos. Para que el reliquiario gótico pueda volver a lucir completo y con todo su esplendor falta localizar y recuperar las figuras San Pablo, San Pedro, San Esteban, San Miguel y Santa Cecilia.
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