Torra pide que se sancione a los policías que han atacado al secesionismo

El presidente de la Generalitat, Quim Torra, envió ayer una carta al ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, en la que le pide que “depure responsabilidades” entre los cuerpos de seguridad ante la participación de algunos agentes en ataques contra el independentismo o de corte fascista. Para el president, es “urgente poner fin a la escalada de violencia en Cataluña por parte de grupos violentos”.

En su misiva, Torra recuerda los tres incidentes en los que agentes del orden se han visto involucrados: el ataque al fotoperiodista Jordi Borràs por parte de un policía nacional; los insultos a dos diputados de Esquerra Republicana el día de la entrega de las Creus de Sant Jordi por parte de un agente del mismo cuerpo y la participación de un guardia civil, fuera de servicio, en una brigada para retirar lazos amarillos en Tarragona. El presidente catalán pide conocer, de manera “urgente”, cualés serán “las medidas disciplinarias que se tomarán” ante esos hechos.

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Torra cree que las actuaciones de los agentes “parecen adecuarse” a las prohibiciones tipificadas en la legislación española. En el texto que interpela directamente al ministro ante “el silencio de la delegada del Gobierno”. El presidenthabía enviado el pasado 9 de agosto una carta similar a Teresa Cunillera, pero la misiva no ha sido respondida, explicaron desde la Delegación, porque Cunillera está de vacaciones. Sin embargo, la propia delegada dijo que piensa responder al volver de su descanso. “Ya sabe lo que le diré, lo mismo que el ministro”, dijo ayer Cunillera mientras hacía una visita oficial al MNAC.

Hace casi ya un mes de la primera reunión entre Torra y Cunillera, en el Palau de la Generalitat. El líder catalán le solicitó a la delegada mediar para que se celebrara en breve una Junta de Seguridad de Cataluña, para tratar entre otras cosas el "crecimiento en los ataques fascistas que se están viviendo en Cataluña", según explicó entonces la portavoz Elsa Artadi.

La Junta no se reúne desde hace un año y un nuevo encuentro sigue sin tener una fecha determinada. Ayer la secretaria de Estado de Seguridad, Ana Botella, hizo un llamamiento a la “sensatez” respecto a la tensión creada por la pugna de los lazos amarillos y aseguró que se trabaja para que “en fechas próximas”, sin especificar, se celebre la reunión.

Botella aseguró que no tiene la información jurídica suficiente para asegurar que los Mossos puedan aplicar la llamada ley mordaza a las personas que son descubiertas retirando lazos amarillos del espacio público. La secretaria defiende que este tema, junto a otros que suceden en Cataluña, debe tratarse “con calma” en la Junta de Seguridad.