La oposición fuerza a Colau a frenar la implantación de carriles bici
Todos los partidos apoyan una proposición del PDeCAT que pide no ampliar la red si no tiene consenso
El ambicioso despliegue de carriles bici del gobierno de la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, sufrió ayer un sonoro revés político que está por ver qué consecuencias tiene. La oposición en pleno apoyó en la Comisión de Urbanismo y Movilidad una proposición del PDeCAT que acuerda “detener la implantación de aquellos nuevos carriles bici que no hayan sido consensuados con vecinos, comerciantes y comunidades educativas de las calles afectadas de acuerdo con estudios de impacto sobre la movilidad”.
El ejecutivo se ha propuesto triplicar la red de carriles ciclables (hasta más de 300 kilómetros) y la medida no siempre es bien recibida en los barrios. Se eliminan carriles para coches y plazas de aparcamiento, se mueven contenedores de basura, se desplazan paradas de bus....
Partido a partido, los concejales aseguraron que están de acuerdo con aumentar la red, pero recordaron las incidencias y quejas y leyeron la cartilla a los responsables de movilidad. Jordi Martí (PDeCAT) habló de un despliegue que prima la cantidad sobre la calidad, recordó el rechazo en algunos barrios (Vallcarca, Tres Torres), aseguró que algunos carriles están poco justificados e incluso afirmó que se han talado árboles. Desde Ciutadans, Koldo Blanco, criticó la “precipitación e imposición” que, aseguró, “genera cierta alarma social”.
Por parte de ERC, Jordi Coronas, reprochó al ejecutivo los “errores en el despliegue y la falta de participación y previsión” en actuaciones “low cost” (calle Montevideo, en Pedralbes). Montse Ballarín, del PSC, cuestionó que el despliegue “no reconozca la diversidad de los barrios” y señaló que en políticas de movilidad es básico el consenso. Javier Mulleras (PP) pidió que acabe el “asedio y la cochefobia y el big bang de carriles fantasma que entorpecen el tráfico”.
Desde el ejecutivo, la concejal de Movilidad, Mercedes Vidal, defendió un despliegue que prevé el Plan de Movilidad Urbana (aprobado en el anterior mandato) y aseguró que “ni se están haciendo de golpe ni sin consenso”.
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