La oposición pide amparo a los letrados del Parlament ante las leyes de ruptura

La oposición admite impotencia ante lo que consideran un abuso de los grupos de Junts pel Sí y la CUP y la presidenta del Parlament, Carme Forcadell. Conocidas las leyes de ruptura (la del referéndum y la de transitoriedad jurídica), defiende que estas violentan tanto el Estatut como la Constitución. Y registradas ya en el Parlament, lamentan que la mesa se niegue a admitirlas a trámite, lo que les facultaría para activar un proceso ordinario para enmendarlas o frenarlas. Inhabilitados para hacerlo, los grupos de Ciudadanos, PSC, Catalunya Sí que Es Pot y PP han decidido presentar hoy en el registro de la Cámara sendos documentos en los que reclaman la elaboración de un informe jurídico por parte de los letrados de la Cámara.

Ciudadanos pretende que los servicios jurídicos de la institución consideren si es "legal" la paralización de la tramitación de la ley, un movimiento que consideran que solo tiene por objeto "favorecer los planes del Gobierno", según ha denunciado hoy el diputado Carlos Carrizosa. "Forcadell está degradando el Parlamento sometiéndolo a lo que digan Puigdemont y Junqueras", ha afirmado.

Lo mismo sostiene el Grupo Socialista que, en su escrito, sostiene que una vez registrada la proposición de ley la mesa no puede hacer otra cosa que declarar su admisión o su inadmisión. Argumenta también la formación liderada por Miquel Iceta que la intención de la Generalitat de convocar un referéndum va en contra del Estatut y de la Constitución, como así apuntaba el dictamen del Consejo de Garantías Estatutarias sobre la ley de Presupuestos de la Generalitat.

Como Ciudadanos, los socialistas reclaman que la mesa acuerde la petición de un informe a los servicios jurídicos de la mesa sobre la legalidad de las dos leyes de ruptura y que, asimismo, se introduzca en el orden del día de la mesa del próximo martes la calificación y la admisión a trámite de ambas, si es que así lo considera la mesa.

Los miembros de Catalunya Sí que Es Pot, que ayer abrieron la puerta a enmendar las leyes de ruptura, consideran que al posponer 'sine die' la tramitación, se está hurtando a los diputados la posibilidad de pronunciarse sobre la misma en la Cámara. El PP, en su escrito, considera la actuación de la mesa "anómala, que no encuentra amparo reglamentario, así como tampoco en la praxis parlamentaria".

El encargo de la mesa está en el aire. Los letrados, no obstante, también podrían optar por cursar un documento de oficio en el que dieran su opinión sobre la situación en la que se encuentra las leyes de ruptura. Ya lo hicieron cuando el Parlament tramitaba su reforma exprés para introducir la tramitación legislativa por lectura única.