La exsecretaria de Tomás Gómez dice que devolvió la tele que la Púnica le envió a su jefe

“Lo recuerdo perfectamente, por lo inusual del obsequio y el volumen, a pesar de los años transcurridos”, explicó ayer por teléfono Hernández, funcionaria del Ayuntamiento de Parla durante 28 años y secretaria de Tomás Gómez mientras fue alcalde durante casi tres mandatos (1999-2008). Hernández se jubiló el año pasado. Relata que el aparato “llegó embalado en una caja muy grande, rectangular”. El obsequio se había adquirido en Hipercor. “Hasta me acuerdo del logotipo del envoltorio”, concreta.

Hernández mantiene que, sin consultar a Gómez, decidió que el repartidor se llevara el televisor devuelto. “Incluso tuve un rifirrafe con él [el trabajador], pero al final accedió”, sostiene. La funcionaria explica que tenía la “plena confianza” del alcalde y que estaba autorizada para tomar ese tipo de decisiones.

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“Son muchos años de carrera y los funcionarios sabemos perfectamente lo que está bien y lo que está mal”, afirma. La secretaria del regidor, que también fue secretario general del PSOE-M hasta el año pasado, considera aceptables regalos como “ramos de flores o cajas de bombones...”.

Sin embargo, el informe de la Guardia Civil aportado al sumario del caso Púnica sostiene que la televisión no fue remitida directamente al alcalde de Parla, sino a otra persona cercana a él.

Amigo de la infancia

Las pesquisas de los investigadores señalan que se trata de un amigo de la infancia de Gómez y de José María Fraile (socialista que sustituyó a Gómez en la alcaldía y que dimitió en 2014 tras ser detenido en el transcurso de la Operación Púnica). Esta persona trabajó, además, en el Ayuntamiento como coordinador de Mantenimiento Urbano. Se hizo de esta forma, indica el informe policial, “al objeto de enmascarar el rastro de la dádiva pagada por el empresario a favor del referido cargo”.

“Esta dirección [la del amigo] es la que aparece en documentos de compra y entrega de un televisor TFT-LCD de 38” Mega Panorámico, valorado en 4.999 euros y adquirido en un centro Hipercor”, señala el informe policial, que asimismo destaca que el aparato fue pagado en efectivo, tal y como se ve en el documento de entrega. El número de teléfono de contacto de la compra estaba, según los investigadores, vinculado a Ana María Ramírez, la secretaria de David Marjaliza.

“No obstante”, continúa el informe, Gómez no sería el único que recibió “tan sustancioso regalo”. También resultaron agraciados cargos políticos de Valdemoro, como Francisco Granados, exsecretario general del PP de Madrid, encarcelado por su supuesta participación en la trama desde octubre de 2014.

David Marjaliza reconoció ayer a los periodistas, en los pasillos de la Asamblea de Madrid, antes de comparecer en la Comisión de Investigación de la Corrupción, que tenía “detalles” con cargos políticos en Navidad, “como es normal”. El valor de la mayor parte de los presentes era pequeño, unos 40 euros. “El 90% eran detalles, pero había algunos más especiales”, admitió.

Negó que los obsequios persiguieran la consecución de algún tipo de favor de los políticos que los recibían. Porque “nadie se deja sobornar por una televisión o un jamón”, argumentó. Recibir un regalo de mayor o menor importancia económica dependía, dijo, del “rango” de la persona a la que iba dirigido.

En la lista aparecen exalcaldes imputados en la Gürtel como Arturo González Panero, de Boadilla del Monte, o Guillermo Ortega, de Majadahonda. La red de Marjaliza regalaba a regidores, trabajadores municipales, policías o concejales muchos jamones o cestas navideñas, pero también plumas y bolígrafos Mont Blanc, relojes Bulgari o Hublot o bolsos de marca. “Detalles habituales de la vida que hacen todas las empresas”, en opinión de Marjaliza.

Las empresas de Marjaliza se hallan inmersas en una investigación judicial por presuntos amaños y tratos de favor en diferentes municipios y sociedades públicas, como Arpegio, que gestionaba el suelo de la Comunidad.

Los diputados no consiguieron ayer arrancar ni una palabra al empresario, que se negó a declarar por recomendación de su letrado. “Si me van a preguntar sobre empresas, personas o cantidades, no podría contestar, sintiéndolo mucho en estos momentos”, manifestó. “En el momento en que se levante el secreto del sumario, volveré y les diré lo que he dicho al juez”, concluyó.