PSE y PP creen que la gestión de Urkullu está frenando el crecimiento

La recuperación económica pende de un hilo, de estímulos del sector público y quizás de una gestión que no perjudique a terceros que dependen del presupuesto público. Aunque los parámetros principales de la economía, salvo el empleo y el consiguiente esfuerzo en gastos sociales, estén mejorando, ese empuje no se deja ver todavía en el consumo, ni en el bienestar de las familias. En ese contexto, los partidos de la oposición PSE y PP, socios a su vez del PNV en la reforma fiscal y quienes con su abstención facilitaron la aprobación de los primeros presupuestos de la era de Iñigo Urkullu al frente del Gobierno —10.215 millones de euros, 899 menos del prorrogado de 2012— están advirtiendo, con preocupación, que varias de las políticas implementadas en las cuentas públicas y en diversos programas pactados al margen, se están retrasando o quedando en el cajón. Si la pasada semana el PSE anunció una serie de medidas para conocer la situación real de la tesorería pública, tras denunciar que el Gobierno estaba retrasando el pago de un 20% de sus obligaciones en los capítulos presupuestarios 2, 4 y 7, gastos corrientes, transferencias corrientes y de capital, el PSE anunció ayer nuevas preguntas parlamentarias para que los responsables de la Hacienda vasca expliquen las razones del retraso que están sufriendo las empresas para acceder a las ayudas o subvenciones por I+D+I convocadas en 2013 por el Gobierno vasco.

Es mala gestión. Retraso en el pago y además en la convocatoria”

El PP se sumó ayer a la preocupación creciente por la contabilidad del Gobierno de Iñigo Urkullu y su portavoz Laura Garrido emplazó al lehendakari Iñigo Urkullu a que se deje de “nuevo estatus” y que “ponga la prioridad en la creación de empleo”. El lehendakari aprovechó el discurso ante los militantes que ofreció el Día de la Patria Vasca, el Aberri Eguna, para responder parcialmente a esas acusaciones y, aunque sin entrar al detalle, acusó al anterior ejecutivo socialista de ser el responsable de esos eventuales problemas al relacionarlos con el elevado endeudamiento al que acudió el anterior gabinete del PSE: “Nos endeudaron hasta las cejas” criticó. El portavoz del PSE en cuestiones de desarrollo económico y competitividad, Vicente Reyes, subrayó ayer que el Ejecutivo no ha comenzado a resolver hasta los dos primeros meses de 2014, “con el consiguiente perjuicio para las empresas, sobre todo PYMES” esas ayudas y subvenciones por proyectos de I+D+I. Reyes reprochó la “mala gestión” por parte del Gobierno del PNV, ya que, además de los retrasos en la convocatoria de 2013 “aún no han pagado la segunda parte de las ayudas concedidas en 2012 que tenían que haber pagado en el primer trimestre de 2013”. Tras destacar que el ejecutivo lleva un año de retraso, el parlamentario socialista se preguntó cómo van a seguir haciendo esas empresas la I+D que necesitan. “¿Qué va a pasar con las ayudas de 2013? Tal como van, ¿cobrarán en 2015?”, se preguntó.

Hay pasividad en las políticas para crear empleo”

El representante socialista advirtió con preocupación que, al retraso en el pago, se une ahora también el retraso en la concesión, ya que las convocatorias de I+D+i de 2013 se resolvieron entre el 31 de enero y el 25 de febrero de este año. “No se trata sólo del perjuicio de un retraso, son convocatorias de encuadre comunitario que tienen un efecto incentivador. Si una empresa sabe que le conceden la ayuda, puede intensificar el proyecto, pero si lo conceden finalizado el año”, dijo y luego se preguntó: ¿dónde está el efecto incentivador? Reyes registró nuevas preguntas para que el Ejecutivo explique a qué se deben los retrasos; cuándo se pagará lo que se adeuda desde 2012; cuándo se resolverán las de 2013; cómo se resolverá el desfase, y finalmente cómo se solventará el perjuicio causado a los solicitantes en el desarrollo de sus proyectos o para los nuevos. En la misma línea, Garrido lamentó durante una rueda de prensa en Vitoria la” pasividad de Urkullu en el impulso de acciones para favorecer la creación de empleo” en Euskadi, la segunda comunidad autónoma española tras Andalucía, dijo, en la que más está creciendo el desempleo. Garrido criticó el retraso en la habilitación de recursos y las demoras en librar los fondos prometidos por Urkullu para ayudar a proyectos relacionados con el aprendizaje.