Fabra se diluye en la entrevista de TVE

El presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, desaprovechó este lunes la entrevista realizada en Los desayunos de TVE para cerrar las dudas sobre su liderazgo y trasladar una imagen de firmeza en materia de lucha contra la corrupción y en las reivindicaciones para lograr una financiación justa en la Comunidad Valenciana.

Fabra intentó desvincular el resultado del PP en la Comunidad Valenciana en las elecciones al Parlamento Europeo con sus opciones para ser candidato a la presidencia de la Generalitat en 2015. “Se ha hablado mucho, pero para todos va a ser un termómetro”, prosiguió, “Se valora la labor de gobierno en los territorios y suelen ser unas elecciones críticas para el partido en el Gobierno”. “El PP en las encuestas sigue siendo el partido que va a contar con [el apoyo de] la mayoría de todos los ciudadanos”, remachó. Ante la ambigüedad de la respuesta, le repreguntaron “¿pero le gustaría repetir?”. “Por supuesto”, respondió Fabra, “por eso estoy trabajando todos los días. Los estatutos dicen que lo decidirá el comité electoral nacional del PP”.

“Quedan todavía seis”

Respecto al problema de la corrupción, Fabra fue tajante cuando se le preguntó si habrá imputados en las listas electorales del PP valenciano. “No, así de rotundo. Los que están imputados no estarán en las listas electorales”. Aunque cuando la conductora del programa de TVE, María Casado, le recordó que todavía quedan seis imputados en el Grupo Popular en las Cortes, Fabra solo asintió: “Quedan todavía seis, quedan todavía seis”. ¿Y hará alguna cosa?, le repreguntaron. “Ya lo he dicho y hemos estado actuando. Los que estén incursos en un proceso judicial tienen que abandonar el escaño y así lo han hecho todas las personas que han sido inmersas en un proceso judicial”.

Además de sobre la figura de Adolfo Suárez, que Fabra glosó antes de acudir al Congreso a trasladar el pésame a sus familiares, el presidente de la Generalitat fue interpelado por la financiación que recibe la Comunidad Valenciana. En su respuesta, el jefe del Consell recurrió al argumento de que “el nuevo modelo, al menos, contemple” una financiación idéntica en sanidad, educación y servicios sociales en todo el Estado. De compensar los déficit, deuda histórica o inversiones del Estado no hubo ni mención.