Díaz activa la mesa del ‘ladrillo sostenible’ pero “sin los errores del pasado”
El Gobierno aprobará en marzo un decreto ley para impulsar el sector con 200 millones de euros
Aunque no lo dice públicamente (salvo en ocasiones el singular consejero de Economía, José Sánchez Maldonado), el propósito del Gobierno andaluz es bajar del millón de parados registrado en los próximos meses. Y para lograrlo es vital la reactivación del sector de la construcción, que ha dejado sin empleo a más de medio millón de personas en Andalucía desde el inicio de la crisis y cuya recolocación fuera de esta actividad se antoja muy difícil. Este fue el mensaje que lanzó este viernes la presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, en una reunión con representantes de 18 agencias e instituciones públicas, asociaciones privadas, sindicatos y patronal para constituir la mesa de la construcción sostenible. Esta cita propició la primera foto de la socialista con la nueva secretaria general de UGT, Carmen Castilla, y el flamante presidente de la Confederación de Empresarios de Andalucía, Javier González de Lara.
En este acto, Díaz apostó por reactivar “un sector estratégico con medidas concretas”, desvinculado de la especulación y “sin cometer los errores del pasado”. La propuesta de la Junta actúa en varios frentes, relacionados con la rehabilitación energética y arquitectónica de edificios.
En marzo, según dijo, se aprobará un decreto ley “dirigido al impulso a la sostenibilidad energética en el sector de la construcción y la industria y en el ámbito doméstico”. Estará dotado con 200 millones de euros, como ya anunció la semana pasada en el Parlamento. Estos fondos en su gran parte proceden de la Unión Europea.
La Junta también aprobará otro plan “integral” para reactivar el sector “que permita recuperar y crear puestos de trabajo y el desarrollo sólido de las empresas andaluzas” tanto dentro como fuera de la comunidad. Este plan estará presentado en octubre, tendrá una vigencia de 2015 a 2020 y priorizará la eficiencia energética de las construcciones.
Otra de las patas del impulso del ladrillo sostenible afecta a la rehabilitación del parque hotelero de Andalucía o la construcción de la autovía del Almanzora. La presidenta andaluza no incluyó en este paquete la demolición del hotel Algarrobico, en Carboneras (Almería), como sí hizo el pasado 22 de enero en el Parlamento.. “Hay distintas posibilidades de dar salida a un sector de arrastre como es el de la construcción, al que no vamos a renunciar y al que, aprendiendo la lección, tenemos que dinamizar en mejores condiciones, generando empleo y riqueza y protegiendo al mismo tiempo el patrimonio natural de Andalucía”, señaló.
Los representantes de las entidades invitadas aplaudieron la iniciativa de Díaz, aunque también hubo una queja generalizada sobre el exceso de burocracia que ralentizan los proyectos. El presidente de la federación andaluza de Urbanizadores y Turismo Residencial, Ricardo Arranz, elogió “la valentía de hablar por primera vez de construcción como la industria más importante” de la comunidad, informa Efe. El presidente de la patronal consideró que la propuesta va “en la dirección adecuada”, mientras que el representante de la asociación de promotores y productores de energías renovables, Mariano Barroso, defendió medidas que apuesta por el autoconsumo energético porque, según él, generarían más empleo que los 200 millones de inversión prometidos.
El secretario general de CC OO, Francisco Carbonero, calificó de “interesante” la iniciativa y aseguró que los “culpables” de la caída de este sector son los que han permitido que la construcción “sea un instrumento especulativo”.
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