Hacienda prevé aumentar en un 68% los ingresos por depósitos bancarios

La autonomía financiera de Andalucía, como la del resto de las comunidades autónomas es muy limitada. Más del 80% del Presupuesto andaluz está condicionado por los fondos que recibe del Estado o de la Unión Europea. Los tributos propios de la comunidad apenas suponen el 1,2% de los ingresos no financieros de la Junta en unas cuentas que alcanzan los 29.619 millones de euros para 2014. Pero dentro del capítulo de ingresos —al margen de los financieros (emisión de deuda)— son los que más crecen para el próximo año, según el proyecto de ley de Presupuestos enviado ayer al Parlamento.

La recaudación por los impuestos propios suponen 310 millones de euros frente a los 239 del actual ejercicio, lo que implica un 29,5% más que en 2013. Este aumento se debe, sobre todo, al aumento de los ingresos por el impuesto sobre depósitos de clientes en entidades de crédito en Andalucía, una figura que el Gobierno andaluz creó en 2010, para taponar la caída de la recaudación, y que empezó a aplicar en 2011, aunque no ha sido hasta dos años después cuando ha podido obtener ingresos. Los bancos decidieron no hacer las liquidaciones ya que estaba pendiente una sentencia del Tribunal Constitucional sobre este impuesto aprobado en Extremadura. El alto tribunal avaló al Gobierno extremeño. También Canarias lo aplica en sus cuentas.

Según consta en el proyecto de ley, Andalucía ingresará en 2014 por este concepto 162 millones de euros, un 68,2% más de lo calculado para 2013. Esa cifra supone casi la mitad (el 52%) del total de los ingresos por tributos propios para 2014.

Este incremento se debe a que Hacienda ha desestimado la mayoría de los recursos interpuestos por las entidades financieras que plantearon rectificaciones de autoliquidaciones. Según informó la consejera de Hacienda y Administración Públicas, María Jesús Montero, hasta 61 entidades interpusieron recursos a las autoliquidaciones o de declaraciones-liquidaciones de 2011 y 2012. Todas ellas han sido desestimadas y este año, Hacienda ha pasado a cobro 45,9 millones de euros.

Dentro de los tributos propios, también aumentan las estimaciones de recaudación por el canon de mejora de infraestructuras hidráulicas que crecen un 26,6%, al pasar de 50,4 millones en 2013 a 63,9 el próximo año.

También se espera un aumento en un 4,8% de las tasas vinculadas a los servicios.

Lo que sí bajan son los ingresos por los llamados impuestos ecológicos, que engloba cinco figuras: emisiones de gases a la atmósfera, vertidos a aguas litorales, depósitos de residuos radioactivos y peligrosos y el impuesto sobre las bolsas de plástico de un solo uso en Andalucía. Las previsiones de ingresos se reducen en un 17%, de los 17,5 millones de este año, a 14,2 millones. La recaudación por el uso de las bolsas de plástico es el que más desciende (un 58%), algo que Hacienda atribuye al efecto disuasorio.

La consejera de Hacienda insistió ayer en que los Presupuestos de la comunidad para 2014 no prevé el aumento de la presión fiscal, aunque sus socios de IU quieren mantener vivo este debate. “No parece adecuado aumentar la presión fiscal”, dijo Montero tras entregar el proyecto de ley al presidente del Parlamento, Manuel Gracia. La consejera recordó que el Gobierno central tiene previsto abrir un debate sobre el sistema fiscal el próximo año y que “con la mayor brevedad”, una vez aprobada a finales de diciembre la ley de Presupuestos, pretende alcanzar una posición común con los partidos y los agentes sociales sobre este asunto.

Pese a que el proyecto de ley no hay ninguna subida tributaria, el presidente del PP, Juan Ignacio Zoido, dedujo que el incremento en torno al 3% de la recaudación en Andalucía “sólo puede venir por una subida de impuestos”. La Junta atribuye este aumento a una leve mejora de la economía regional, una posibilidad que Zoido tampoco contempla porque en Andalucía “no se va a dinamizar la economía ni se va a crear empleo”, informa Europa Press.

Zoido no descartó recurrir los Presupuestos ante los tribunales al no provincializar las inversiones. Según él, esta decisión dificulta la tarea de control de la oposición.