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VIAJE DEL LEHENDAKARI A ee uu

Urkullu: “El espíritu constructivo del memorial del 11S es una referencia”

Varios académicos piden abrir nuevos “espacios para escuchar a las víctimas”

El lehendakari ante el memorial del 11S, en Nueva York
El lehendakari ante el memorial del 11S, en Nueva YorkIREKIA

Bajo el único árbol que sobrevivió al atentado del 11S en Nueva York, un peral que se ha convertido en todo un símbolo del memorial a los miles de víctimas erigido en la zona cero, el lehendakari, Iñigo Urkullu, entregó a los responsables del memorial una parte del antiguo árbol de Gernika. Fue el primero de los varios vínculos entre Euskadi y Nueva York que se sintieron en el homenaje de Urkullu a las víctimas del atentado del 11S en la zona cero. En un momento en el que se debe avanzar en la creación del Memorial de víctimas y el Parlamento debe iniciar el debate sobre la ley que sostendrá el Instituto vasco de la Memoria, el lehendakari resaltó que el memorial situado en pleno corazón de Manhattan, aún entre grúas, es una “referencia” para la construcción de la memoria en Euskadi.

El lehendakari apostó por tener en cuenta en Euskadi el enfoque del memorial estadounidense, porque recuerda “lo peor del ser humano” ensalzando la capacidad “constructiva” del ser humano, en un entorno en el que las torres son un estanque sin fondo rodeado de los nombres de los fallecidos. La vicepresidenta del memorial, Lynn Rasic, explicó al lehendakari cómo el centro cuida al milímetro los detalles, el simbolismo y las opiniones de las familias de los fallecidos. Tanto que la institución creó un algoritmo para atender las 1.600 peticiones sobre dónde querían que descansara el nombre del familiar fallecido. Minutos antes, el plan de paz del Gobierno vasco, que incluye entre sus 18 iniciativas varias en torno a la memoria, así como sobre el testimonio de las víctimas, las torturas o la política penitenciaria, pasó su primer filtro internacional.

El informe dará pie

El lehendakari recibió la evaluación preliminar de expertos de cuatro universidades estadounidenses así como del United States Institute for Peace (USIP) sobre su plan de paz en la delegación vasca de Nueva York. El documento, de cerca de veinte páginas, incluye varias reflexiones previas al informe más exhaustivo que recibirá el jefe del Ejecutivo a final de año, después de que el Consejo de Gobierno apruebe definitivamente su plan de paz, hoy en fase de borrador y con alegaciones de 28 agentes distintos, muchos críticos con el documento. El informe definitivo servirá, resaltó Urkullu, para el “desarrollo práctico” de las iniciativas. Andrea Bartoli, impulsor del centro de resolución de conflictos de Columbia, colaborador en varios procesos de paz, y actualmente decano de la escuela de diplomacia en la Universidad Seton Hall de Nueva Jersey, hizo hincapié ante los medios, tras explicar a Urkullu su informe, en el fenómeno de la “recurrencia, sabemos que países que han tenido conflictos tienden a caer en ellos otra vez”.

La situación actual de Euskadi, dos años después del cese de la violencia de ETA, es para Bartoli un “periodo de cierre” que tendrá influencia en lo que pueda ocurrir dentro de 30 ó 40 años, en referencia a escisiones o el resurgimiento de la violencia que se ha dado en otros lugares. En ese cierre, la académica croata Borislava Manojlovic consideró “positivo” que exista un plan de paz —este es el tercero de Euskadi— como el del lehendakari porque, de haberlo tenido en su país, indicó, el proceso hubiese sido “más rápido” y las "tensiones" que hoy, 18 años después de la guerra, se viven hubiesen sido distintas. El caso vasco es “muy interesante” para los académicos, que explicaron que lo seguirán durante las próximas décadas porque “no hay muchos casos en los que la violencia se interrumpa unilateralmente”.

El informe propone

Bartoli, que introdujo al lehendakari el día anterior en su conferencia en la Universidad de Columbia, hizo hincapié en la convivencia como un proceso, un “esfuerzo sostenido” en el tiempo, y subrayó que se está viviendo en el mundo una “revolución de las víctimas: Antes era siempre la historia de los que ganaron, pero hoy tenemos muchos ejemplos de cómo las víctimas hablan y participan, el País Vasco lo están haciendo”. El grupo adelantó algunas sugerencias genéricas a un plan que alabaron continuamente. La más concreta versa precisamente sobre la necesidad de realizar una reflexión sobre “cómo crear espacios donde se puedan escuchar testimonios y voces plurales de las víctimas”. El resto del documento habla de profundizar en cómo “incentivar al público en general para que apoye y participe en las iniciativas” y de “abrir un espacio de reflexión sobre qué tipo de espacio político o social podría permitir un cambio de mentalidad de la competencia a la cooperación y al consenso”. Las dos únicas páginas hechas públicas destacan que el plan está abierto a aportaciones y que busca “integrar” a los grandes partidos, que hasta la fecha solo han criticado el plan. Urkullu ha asegurado que la solución no llegará desde fuera de Euskadi, pero que quiere escuchar a agentes internacionales. Ya ha solicitado las aportaciones de instituciones europeas a su plan, que ayudarán a que gane “rigor”.

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