Aburto insta a sindicatos y patronal a mantener cauces de diálogo

La pérdida de vigencia del convenio colectivo y el fracaso de las negociaciones entre los sindicatos y la patronal Confebask han puesto, a partir de hoy, en una situación de "inseguridad y aumento de conflictividad y pérdida de cohesión social" a 348.000 trabajadores del País Vasco. Así lo ha asegurado el consejero de Empleo del Gobierno vasco, Juan María Aburto, que ha instado a los agentes sociales a que hagan un "ejercicio de responsabilidad" para que a pesar de las dificultades y diferencias actuales se mantengan los cauces de diálogo y negociación. 

El consejero, que ha comparecido ante los medios junto al viceconsejero de Empleo, Ricardo Barkala, y el director de Trabajo, Xabier Losantos, ha asegurado que el fracaso de las conversaciones para blindar los convenios vascos y evitar que perdieran su vigencia por los cambios en la ultraactividad de la reforma laboral supone para el ejecutivo vasco una "mala noticia". Ha recordado, asimismo, que una empresa es "un proyecto común" entre directivos y empleados sobre el que hay que construir un nuevo acuerdo que beneficie a todas las partes y a la actividad económica. 

La última reunión por parte de la patronal Confebask y los sindicatos LAB, CC. OO. y UGT para llegar a un acuerdo se celebró el pasado viernes a instancias del lehendakari Iñigo Urkullu. Las negociaciones, no obstante, vienen de meses atrás, ya que la reforma laboral aprobada el 8 de julio de 2012 establecía el límite de un año para acordar un nuevo convenio. Hasta entonces, los convenios seguían vigentes de forma indefinida hasta la firma de uno nuevo. 

El nuevo escenario, que el consejero ha calificado siembra la "incertidumbre" en el mundo laboral, afecta a 348.000 de los 613.000 trabajadores vascos, a los que se sumarán, en caso de no haber un acuerdo antes del 31 de diciembre, otras 93.000 personas. El responsable de la cartera de Empleo ha asegurado que la reforma laboral ha supuesto "el fin de 30 años de convenio de golpe y porrazo" ya que, solo el 24% de los convenios que han decaído pueden ubicarse con claridad en uno de ámbito superior. El desamparo, por tanto, del 76% de los empleados es total, ya que se quedan fuera de cualquier cobertura de la negociación colectiva.