Urkullu cree que la cumbre de partidos “marca un nuevo tiempo” en Euskadi

Cuando sentarse juntos en una mesa es el avance, es que hay poco que contar. No hubo acuerdos, ni garantías de ellos, sólo el calendario de reuniones que los partidos fijaron en la primera cumbre liderada por el lehendakari, Iñigo Urkullu. La cita le genera, al menos, una expectativa que no tenía hace sólo dos días de encarrillar una senda de acuerdos que le ayuden a transitar por 2013, sin presupuesto, pero con un diagnóstico en materia económica compartido con los partidos de la oposición. Eso si a base de seguir las pautas que le han dado, sobre todo EH Bildu y el PSE, y en menor medida UPyD en materia tributaria y de lucha contra el fraude.  Urkullu ha asegurado hoy en Bilbao que la reunión "marca un nuevo tiempo" porque por primera vez estuvieron juntas todas las formaciones políticas en una misma mesa. "Hoy estamos mejor que el miércoles pasado", ha señalado el lehendakari en su discurso durante el almuerzo de la Asamblea General de la Confederación Empresarial de Bizkaia (Cebek) a la hora de valorar sus reuniones con las instituciones vascas -Diputaciones y Eudel- y con los partidos vascos.

Si con las diputaciones y Eudel puede cerrar un pacto para usar la mayor capacidad de endeudamiento que les puede generar la flexibilización del déficit, aunque todavía esté en el aire el sistema para aprobar los proyectos de infraestructuras en cada territorio, con los partidos puede coger más oxígeno para reorientar el presupuesto de 2014 y con él la política de inversiones y de incentivos a la economía vasca. Urkullu ha comentado ante un público formado popr empresarios de Bizkaia, que en el encuentro de ayer con los líderes de los partidos compartieron el diagnóstico sobre la grave situación económica y sobre las "consecuencias" que provoca la crisis. "La prioridad de la salida de la crisis está más presente en nuestras agendas y esta agenda común nos apela a la acción. Sabemos que tenemos que actuar y que si lo hacemos lo más juntos posible será más efectivo".

"Es el momento

En el acto celebrado en el Palacio Euskalduna de Bilbao, el lehendakari ha asegurado que "es el momento de la acción y de la inversión, de los hechos y de dar la prioridad a la salida de la crisis". Tal y comoacordaron ayer su Gobierno presentará en junio la propuesta para una reforma tributaria y un plan de lucha contra el fraude fiscal con el objetivo de que ambos entren en vigor el próximo 1 de enero, tras ser tramitados en las tres Juntas Generales, que son las competentes en materia fiscal. Además, en junio comenzarán los trabajos de la comisión sobre la sostenibilidad del sistema vasco de protección social, en julio se iniciará el proceso sobre el redimensionamiento de las administraciones vascas y en otoño comenzará la ponencia sobre el autogobierno y el modelo institucional vasco.

Urkullu ha insistido en que no cejará en la búsqueda de acuerdos, "grandes y pequeños", pese a las críticas que recibe de los grupos de la oposición por no presentar propuestas concretas, ni negociar con un socio que dé estabilidad parlamentaria al Gobierno Vasco. "Me criticarán 10 veces, 100 veces y 1.000 veces", ha advertido de que no dejará de intentarlo. "La política es reintentar lo imposible. Intentaré grandes y pequeños acuerdos. La situación económica requiere consensos y lo voy a intentar cuantas veces sea necesario", ha asegurado, para destacar que se ha avanzado en el acuerdo institucional y ahora es el turno ya de aprobar nuevas medidas de estímulo.

"La crisis también

Ha recordado que el acuerdo logrado con las Diputaciones sobre el destino del posible aumento del techo de déficit público contempla inversiones para el "estímulo" de la economía por un total de 180 millones (90 para Bizkaia, 60 para Gipuzkoa y 30 para Alava). El lehendakari, que ha ratificado su compromiso con la "consolidación fiscal", también ha explicado que con el nuevo endeudamiento se creará un fondo de 20 millones de euros para la innovación. Urkullu ha sostenido ante los empresarios que la crisis también aporta "oportunidades" a Euskadi y ha citado como ventajas del País Vasco el disponer de un tejido industrial que ha "resistido" la crisis y de unas empresas internacionalizadas.

Así mismo, ha destacado que el País Vasco tiene actualmente la ventaja de haber "dejado atrás el lastre del terrorismo" que ha padecido durante cincuenta años. Antes del lehendakari, ha intervenido el hasta hoy presidente de Cebek, José María Vázquez Eguskiza, quien ha recordado sus veinte años al frente de la patronal vizcaína, en la que ha sido relevado por Iñaki Garcinuño. Vázquez Eguskiza, que se ha emocionado al agradecer a su mujer y sus dos hijos el haberle apoyado "durante los quince años que han vivido escoltados por la crueldad imperdonable de ETA", ha reclamado a las instituciones y a la sociedad "confianza" en los empresarios, "que están aquí para ayudar al país".