Català no descarta que el Consell pueda intervenir en la elección de rectores

María José Català responde como una avezada política, a pesar de contar sólo con 32 años. En varias ocasiones se le preguntó por el informe encargado a una grupo de expertos por el ministro de Educación, José Ignacio Wert, en el que se contemplan recomendaciones como la intervención de la Generalitat en la elección de los rectores universitarios. En otras tantas respuestas en el desayuno ofrecido esta mañana del miércoles en el seno del Fórum Europa de Valencia, la consejera de Educación y Cultura contestó que el citado informe "no es vinculante y, por tanto, no tiene por qué ser aplicable". Ni defendió ni rechazó la iniciativa que prevé que el 25% de los miembros del órgano que elija a los rectores sea designado por el gobierno autonómico, lo que ha provocado una reacción airada de la comunidad dirigente universitaria por considerarlo una injerencia. Sí que insistió en que es necesaria una reforma en el sistema universitaria, sin entrar a concretar, y en que el diálogo es imprescindible.

Se lo dijo primero al rector de la Universidad Politécnica de Valencia, Juan Julià, quien protagonizó una larga intervención en el coloquio posterior a la intervención de Català. Tras agradecer la actitud dialogante de la consejera y reconocer algunas propuesta, Julià se preguntó cómo se puede alcanzar, como plantea el informe, la suficiencia financiera y el éxito de las mejores universidades del mundo, si en éstas el gasto financiero por alumno es de 40.000 euros al año y en España, de 10.000 euros. Añadió que la recomendación sobre los cambios en la gobernanza es inaplicable jurídicamente porque afecta a la autonomía universitaria, sancionada por ley.

Català reconoció que "es difícil" en tiempos de crisis realizar "planteamientos inversores" y reiteró que el informe no es vinculante, pero hay que "mejorar el sistema de gobernanza", si bien el Gobierno tiene que velar por la concordia. Afirmó que si existen dudas sobre la legalidad del modelo que plantea lo más adecuado es solicitar a la Abogacía del Estado un informe al respecto. En todo caso, se ha mostrado a favor de "mejorar el sistema de gobernanza", aunque ha defendido la necesidad de que se haga dentro del "acuerdo" con el sistema universitario.

La educación centró la mayor parte de la intervención y el coloquio del desayuno organizado por el Fórum Europa Tribuna Mediterránea y patrocinado por Asisa, que tuvo lugar en el hotel Astoria. el presidente de las Cortes Valencianas, Juan Cotino, los consejeros Serafín Castellano y Máximo Buch, y numerosos cargos políticos del PP y de la Generalitat arroparon a la consejera que fue presentada por Ramon Ferrer, presidente de la Acadèmia Valenciana de la Llengua.

La consejera defiende la educación diferenciada por sexo si así lo piden los padres

Català dijo haberse marcado como reto que "hay que intentar" que en el plazo de 10 años "el cien por cien del profesorado esté formado en inglés, la mitad de los alumnos que acaba Secundaria posea un nivel B2 y que el 35% de la población valenciana tenga un buen nivel en ese idioma" (ahora solo es el 15%). Además, mostró su convencimiento de que el Ministerio de Educación adoptará en un futuro, en el Estatuto del Docente, la medida de pedir el requisito lingístico para acceder a la función pública docente. Por su parte, la Comunidad Valenciana ya contempla para las oposiciones convocadas este año que el conocimiento de inglés suponga una puntuación "muy importante en la calificación".

Respecto al valenciano, Català consideró que "no se puede utilizar la lengua para confrontar". "Y quienes lo hacen no le están haciendo ningún favor", y añadió: "Nuestra guerra es que nuestra lengua no se pierda". Sobre la implantación de la jornada continua, comentó que la consejería "no puede servir de límite a ningún proyecto educativo" y recordó que las actividades extraescolares que se propongan no deben tener coste ni para la administración ni para los padres, por lo que ha abogado por "estimular la creatividad" y buscar colaboraciones con entidades deportivas o musicales.

Sobre las infraestructuras educativas y el plan de revisión de centros anunciado por el Consell tras el derrumbe de parte del forjado sanitario de un colegio de Santa Pola (Alicante), señaló que "hacer una revisión de 1.500 centros, si se quiere hacer bien, requiere tiempo" y ha apuntado que lo que se ha hecho es "priorizar los más antiguos".

Sobre los colegios con educación diferenciada por sexos, la consejera indicó que en la Comunidad Valenciana existen centros de este tipo y que la región "no ha entrado en la polémica suscitada porque hay ejemplos en el ámbito internacional de éxito y total normalidad".

"Los centros financiados con fondos públicos, porque yo no hago diferencias entre públicos y privados-concertados, si son centros sostenidos con fondos públicos, y hay ya una oferta de educación diferenciada, damos la posibilidad a los padres de que exista esa oferta para sus hijos", razonó. La consejera incidió en que la Comunidad Valenciana destina un 30% de inversión a Educación frente al 22% y, aun así, no se han obtenido "los resultados esperados", lo que demuestra, a su parecer, que "no todo es cuestión de recursos". Aseguró que su lucha principal era contra el fracaso escolar.